­Calvià vira hacia la izquierda. El PSOE vuelve a ganar unas elecciones en el municipio, después de tres legislaturas de tonalidad monocolor azul del PP, de las cuales la primera fue en coalición con UM y las dos últimas con mayoría absoluta. Las elecciones de ayer dejaron la representación municipal más fragmentada de la historia política reciente del municipio, con la entrada en el Ayuntamiento de Sí Se Puede Calvià, Esquerra Oberta (la coalición electoral de Més y EU) y Ciudadanos (C´s). Todos, con dos concejales cada uno.

El escenario político que se abre ahora en el municipio no se daba en el municipio desde hace más de dos décadas, con la posibilidad de que se forme un gobierno progresista para lo cual el líder socialista, Alfonso Rodríguez Badal, tendrá que hacer valer su victoria electoral, con 5.736 votos y 10 regidores, uno menos que en 2011.

Una de las grandes sorpresas de la jornada y de las últimas convocatorias electorales de Calvià fue Sí Se Puede, un partido de reciente creación que logra entrar en el Ayuntamiento con dos regidores. La lista encabezada por Israel Molina aspira a llevar el espíritu Podemos a la administración municipal, y su apoyo será decisivo para conformar un gobierno progresista en Calvià. Esquerra Oberta, con 1.196 votos, logra otras dos actas de concejal, que ocuparán el líder local de Més per Calvià, Rafel Sedano, y el de IU, Alfonso Rodríguez Sánchez.

Si la izquierda tiene entre sus manos la posibilidad de recuperar un enclave estratégico como es Calvià, el segundo municipio de Balears en población y uno de los principales destinos turísticos del Mediterráneo, la derecha representada por el PP se queda maltrecha. Con los resultados de ayer, Ruiz lo tiene muy difícil para tomar el relevo de sus dos predecesores del PP, Carlos Delgado y Manu Onieva, y no le bastaría el apoyo de Ciudadanos para conseguir la vara de mando. En cuatro años, los populares se han dejado por el camino 1.700 votos y cinco concejales. En esta legislatura han tenido 14 ediles y, en la siguiente, tendrán nueve.

Importantes retos

A falta de cómo se desarrollen las políticas de pactos en los próximos días, el equipo de gobierno resultante de las urnas tiene por delante importantes retos que afrontar. El primero de ellos será inmediato: la aplicación del plan de choque para combatir la mala imagen de Magaluf. En este inicio del verano, han entrado en vigor la batería de medidas consensuadas en la comisión de seguimiento de Magaluf, con representación política y empresarial, y ratificadas en el último pleno municipal ordinario de la legislatura.

La nueva administración tendrá que garantizar los medios para controlar medidas como la prohibición de consumir alcohol por la noche en las calles de las zonas turísticas o las restricciones normativas a la organización de las excursiones alcohólicas (en inglés, pub crawling).