El inicio de la campaña electoral ha reavivado en Calvià un debate que se viene sosteniendo desde hace años sobre el modo de regular la profusión de cartelería con imágenes de candidatos. El último partido en advertir de la "mala imagen" que genera la colocación de carteles "de forma masiva y descontrolada" ha sido Esquerra Oberta, que ha reclamado públicamente "responsabilidad" a los partidos.
"La campaña electoral no debería ser una vía libre para ensuciar el municipio", declaró el candidato de esta coalición electoral, Rafel Sedano, quien recalcó que su campaña se compone exclusivamente de 200 carteles y 20 pancartas. "Son suficientes para estar presentes en todos los núcleos", sostuvo. Se da la circunstancia de que, a principios del año pasado, el pleno municipal de Calvià aprobó por unanimidad una moción socialista encaminada a lograr unas campañas electorales "más sostenibles en su entorno y más respetuosas con el medio ambiente y más respetuosas con la imagen y el entorno rural, residencial y paisajístico.
