Los caravanistas de Palma convocan a su protesta a todos los ciudadanos que sufren la emergencia habitacional

El colectivo se concentrará el sábado en la plaza de Cort contra la ordenanza cívica que prevé multas de hasta 1.500 euros por vivir en una autocaravana

"Cuando no te basta el dinero para el alquiler, pasas a la autocarvana. Y de aquí ya te vas debajo de un puente", subraya uno de los convocantes

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Redacción

Los caravanistas de Palma calientan motores de cara a la protesta que celebrarán el sábado por la mañana en la plaza de Cort. Se concentrarán contra la nueva ordenanza cívica que prohíbe vivir de manera indefinida en una caravana y prevé multas de hasta 1.500 euros en caso de que no cambien de ubicación cada diez días. Además, denuncian que el Ayuntamiento de Palma se niega a empadronarles. Pero por encima de todo, quieren que se les una todo aquel que quiera protestar contra la emergencia habitacional.

"El problema no es la autocaravana, el verdadero problema es el precio de los alquileres. Pretenden que nosotros seamos un árbol con el que ellos ocultan el bosque", ha manifestado Javier González, uno de los caravanistas convocantes de la protesta que tendrá lugar en frente del Consistorio entre las 10:00 y las 12:00 horas. "La ciudadanía debe entender el problema que hay, y va creciendo cada vez más. Quizás nosotros ya no veamos la solución, pero los jóvenes están alquilando entre cuatro, cinco o seis personas. Y así no hay forma de que tengan un futuro", ha añadido.

Carvanas estacionadas en Son Güells.

Carvanas estacionadas en Son Güells. / DM

González ha atendido a los medios de comunicación en Son Güells, donde vive en su caravana junto con otro medio centenar de vehículos. "Antes todas estas personas vivían en viviendas. Somos la demostración de un problema. Cuando no te basta el dinero para el alquiler, pasas a la autocarvana. Y de aquí ya vas debajo de un puente", ha subrayado.

"Nosotros no somos la causa, somos la consecuencia. Y esto ocurre aquí y en muchas partes. Somos ciudadanos, en teoría somos libres, y pagamos impuestos", ha reivindicado.

En conjunto, estima que en Palma hay unas 400 personas que residen permanentemente en una caravana, especialmente en tres núcleos: Son Güells, Ciutat Jardí y Son Hugo, enclaves alejados de edificios residenciales. La nueva ordenanza, ahora en exposición pública, considera estos vehículos infraviviendas, las asimila a una chabola y prohíbe hacer vida en ellas.

Este colectivo reclama reunirse con el alcalde de Palma, Jaime Martínez. "Queremos una solución. Yo no me niego a moverme cada diez días, pero que me diga por qué no puedo vivir en mi caravana", ha argumentado Pep de las Heras, convocante de la protesta y también residente en Son Güells.

"Aquí todos son trabajadores"

A las diez de la mañana De las Heras y González son los únicos caravanistas que están en este enclave. "Es que todos son trabajadores que por diferentes circunstancias no pueden permitirse el lujo de alquilar una habitación, incluso trabajando. ¿El alcalde quiere prohibirnos? Bien, pues que nos facilite una vivienda asequible", ha señalado De las Heras.

"Aquí hay quien va en silla de ruedas o que acaba de ser operado. Y por no estar empadronado no tiene visita del médico a domicilio. Si no fuera por nosotros, se hubiera muerto", dice este residente señalando una de las caravanas.

Martínez afirmó el lunes en la radio Ser Mallorca que la alternativa a vivir en una caravana "son los servicios sociales". De las Heras le ha respondido. "No queremos ir a los servicios sociales. No quiero que el alcalde me regale comida, ni dinero, ni nada. En mi caravana ya tengo comida y una ducha, solo le pido que me deje vivir tranquilo el tiempo que me quede", ha indicado.

Ambos han negado que supongan un problema para la convivencia, como justifica Martínez, y han reiterado la importancia de acudir a la protesta del sábado en Cort. En todo caso, descartan desplazarse con las caravanas para no colapsar el centro.