ACHINIB se ofrece para "mediar" entre los vecinos de Son Armadans y los locales de masaje chinos

La Asociación China de Balears quiere establecer "un diálogo conciliador" para "calmar la polémica situación generada por algunos de estos establecimientos".

Local de masaje chino en Son Armadans.

Local de masaje chino en Son Armadans. / M. Vicens

Jaume Bauzà

Jaume Bauzà

La Asociación China de Balears (ACHINIB) se ha ofrecido para "mediar" entre los vecinos de Son Armadans y los propietarios de locales de masaje chinos que operan en el barrio con el objetivo de establecer "un diálogo conciliador" y "calmar la polémica situación generada por algunos de estos establecimientos".

"Respetamos cualquier tipo de negocio siempre que se encuentre dentro de los márgenes de la legalidad”, ha subrayado el presidente de la asociación, Fang ji. "Valoramos y respaldamos a todas las asociaciones vecinales que luchan por defender los intereses generales de sus vecinos”, ha añadido en referencia a la preocupación en el barrio por la proliferación de estos locales en los que se ejerce prostitución encubierta.

ACHINIB "tiene una clara voluntad de mediar en cualquier situación que vulnere la respetabilidad del resto de la comunidad china”. En este sentido, Fang Ji ha expresado su deseo de reunirse con todos los empresarios chinos que tengan este tipo de negocios en Son Armadans para "establecer un diálogo constructivo con la asociación de vecinos y poder llegar a un acuerdo".

Desde esta asociación han recordado además que "estamos a disposición de cualquier organismo público, así como de cualquier asociación interesada en abordar este tema”. La solución, considera Ji, pasa por "un diálogo que permita alcanzar una convivencia equitativa y respetuosa entre todos los ciudadanos".

La asociación de vecinos de Son Armandans tiene previsto reunirse el día 31 con el regidor de Urbanismo, Óscar Fidalgo, para pedirle que regule la distancia entre estos locales de la misma forma que se hace con farmacias o locales de juego. "Es un despropósito tener diez locales en 500 metros", destaca la presidenta de los vecinos, Catalina Llompart, sobre la proliferación de estos establecimientos, especialmente en la calle Marquès de la Sènia.

El lunes por la tarde hubo una trifulca entre trabajadoras de dos de estos locales ubicados en esta calle por la captación de un cliente que acabó con dos mujeres detenidas, un detenido y una cuarta trabajadora investigada.