El director del IB-Salut vuelve a negar que la trama Koldo les presionara para que dejaran caducar la reclamación como apunta la Audiencia Nacional

El director general del IB-Salut, Javier Ureña, ha vuelto a negar que la 'trama Koldo' presionará al Govern de Marga Prohens para que desistiera de la reclamación millonaria por las mascarillas fraudulentas en su comparecencia de hoy en el Parlament.

Según apunta el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno en su auto, Koldo García, el principal acusado y exasesor del ministro de Fomento José Luis Ábalos, utilizó su poder e influencia para conseguir que el actual Ejecutivo autonómico no reclamara el dinero: "Se han observado indicios que apuntan a la influencia que Koldo ha ejercido en beneficio de Soluciones de Gestión en el contexto de la reclamación dimanante de la Administración balear, a fin de que esta no prosperara y de este modo favorecer a la mercantil y a su titular".

Koldo no necesitó presionar al PSOE ni al PP de Baleares

El magistrado incluso señala que "pocos días antes de la fecha límite se han dejado de observar comunicaciones que aborden este asunto, por lo que puede colegirse que podría haberse producido la caducidad de la reclamación y, por lo tanto, el ejercicio de la influencia por parte de Koldo ha surtido efecto".

Ureña insiste en que "no ha habido absolutamente ningún contacto con la trama ni hemos recibido ninguna directriz" para tomar la decisión de dejar caer la reclamación y atribuye los indicios del magistrado a "confabulaciones malintencionadas". Asimismo, reitera que el plazo "nunca puede acabar" el 18 de enero como apunta el auto de la Audiencia Nacional al ser una "hipótesis de la trama totalmente descabellada", si bien el juez establece esta fecha porque el Govern notifica el trámite de audiencia a los afectados el 17 de octubre, esto es, justo tres meses antes de que el expediente caducada, como apunta el juez.

En este sentido, el director del IB-Salut ha defendido que firmó el desistimiento de la reclamación millonaria porque el expediente iniciado por el Pacto "dificultaba enormemente" la posibilidad de recuperar el dinero porque existe un certificado de conformidad con el que el anterior IB-Salut garantizó su conformidad con el pedido a la empresa del caso Koldo pese a haber comprobado que no la cumplía: "De prosperar solo permitía recuperar una parte, totalmente insuficiente". Pese a ello, Ureña no ha explicado por qué tomó la decisión de forma unilateral y sin aportar ningún informe técnico ni jurídico que avalara una decisión de este calado.

Ureña incide en que el Govern "siempre" ha trabajado con el plazo de ocho meses para gestionar la reclamación, si bien la actual dirección firmó una resolución el 24 de agosto de 2023 en la que dejaban claro que el plazo máximo era de tres meses.

Pasaron varios meses hasta que el pasado 19 de marzo el IB-Salut decidió enviar una diligencia a la empresa Soluciones de Gestión "para hacer constar que se ha detectado un error material" y donde se "señalaba un plazo máximo para dictar resolución expresa de tres meses [...] es realmente de 8 meses". Tan solo dos días más tarde, Ureña firmaba el desistimiento. El Tribunal Constitucional, en una sentencia de 2021, decretó la nulidad del plazo de ocho meses para las administraciones autonómicas sin una legislación contractual propia, como es el caso de Baleares.