Los constructores piden un pacto social para solucionar el problema de la vivienda

La patronal de la construcción de Baleares ha denunciado esta mañana la alarma que existe por la falta de viviendas, tanto de compra de alquiler, lo que hace prácticamente imposible para los jóvenes poder acceder a un piso en unas condiciones económicas justas. Los representantes de este sector en Caeb, Hans Lenz, Luis Martín y Óscar Carreras, en nombre de los constructores, promotores y vendedores de viviendas, pidieron a los partidos políticos de Baleares que firmen una especie de pacto social para buscar una solución definitiva a este problema.

El sector considera que los partidos políticos deben dejarse aconsejar por los expertos en construcción, ya que el problema por falta de vivienda a un precio asequible no se soluciona en cuatro años, sino a un plazo mucho más largo, por lo que se necesita una política continuista.

Los expertos afirman que estos momentos las islas, por la realidad demográfica, tienen un déficit de 20.000 viviendas, tanto para venta como para alquiler. Pero la situación de esta actividad hace muy difícil poder realizar estos proyectos urbanísticos, entre otras cosas porque tanto el precio del suelo, como de la construcción, es el más elevado de todo el país. “En Baleares es imposible construir por debajo de 200.000 euros por vivienda”, señaló el promotor Luis Martín.

Los constructores se quejan del aumento del precio del suelo, que en ocho años ha subido cerca de un 80 por ciento. Al ser tan caro la compra del terreno, este aumento del precio se traduce después en la venta de las viviendas.

Los empresarios han realizado un vídeo que impulsa una campaña de SOS, en el que detallan las posibles soluciones que plantean los expertos para buscar una salida a este problema social que se vive en Baleares. Soluciones que pasan, además de proponer un pacto político, que se crezca en altura, que se aprovechen los solares que están obsoletos y que se aceleren la concesión de las licencias para poder construir.

Los constructores no defienden que se construya en terreno rústico, sino que hay que aprovechar los solares de las propias ciudades. Los expertos consideran que en determinadas zonas de las ciudades se podría plantear levantar edificios más altos, que permitan más pisos, ya que en estos momentos las familiares no necesitan viviendas tan amplias como las que se construían antes.

Los empresarios se mostraron muy críticos con la reciente ley que limitará el aumento de los precios del alquiler. Consideran que estas medidas lo que hacen es retirar del mercado del alquiler muchos pisos, porque los inversores interpretan que el negocio no es rentable al quedar limitado el precio. Estos promotores, señalando que ya se han producido ejemplos en Mallorca, sostienen que esta ley lo que hace es que muchos propietarios abandonan el negocio del alquiler y deciden vender sus pisos, donde no existe una limitación de precios.

Los constructores también critican las promesas políticas que se han avanzado en este periodo electoral, en las que se ha anunciado que se van a ofrecer en alquiler las viviendas que pertenecen al Sareb. Recordaron que en Baleares apenas hay unas 120 viviendas de estas características y señalaron que posiblemente sean pisos, o bien que están okupados, o en los que no se puede vivir.

Los representantes de esta patronal también pidieron que se inviertan ayudas a los jóvenes para que puedan acceder a la compra de una vivienda. Ayudas que pasarían por financiar, como mínimo, la entrada del piso, que es un requisito que para muchos jóvenes hace casi imposible poder adquirir una vivienda en propiedad.

“Los partidos políticos deberían dejarse de ocurrencias en el periodo electoral y escuchar a los que saben de este sector, para encontrar una solución a esta urgencia social”, señaló el presidente de la Asociación Empresarial de la Caeb, Óscar Carreras.