Piden seis años de cárcel para el patrón de una patera con 25 personas a bordo

El acusado, natural de Guinea, se quedó sin combustible en la barca cerca de Cabrera el pasado mes de febrero

El acusado de patronear una patera, hoy en la Audiencia de Palma.

El acusado de patronear una patera, hoy en la Audiencia de Palma. / D.M.

Redacción

La fiscalía solicita una pena de seis años de prisión para el patrón de una patera con 25 personas a bordo que fue interceptada el pasado mes de febrero sin combustible en aguas de Cabrera después de casi dos días de travesía desde Argelia. El sospechoso, de 47 años y natural de Guinea, lleva tres meses preso y está acusado de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

El hombre ha sido excarcelado hoy por la mañana y conducido hasta la Audiencia de Palma, donde se ha celebrado una vista previa. No ha querido conformarse con la condena que reclamaba el ministerio público, por lo que el tribunal de la sección segunda ha señalado el juicio para el próximo 9 de septiembre. El sospechoso ha indicado que habla un dialecto de su país, además de francés.

Con tres menores de edad

El encausado presuntamente manejaba y llevaba el control de una pequeña embarcación de seis metros de eslora y dos metros de manga, provista de un solo motor de 50 caballos, con un total de 25 personas a bordo, entre ellas tres menores de edad, el pasado 6 de febrero de 2024 al mediodía. Todos ellos pretendían acceder irregularmente al territorio nacional de España. La nave se adentró en aguas españolas eludiendo cualquier tipo de puesto fronterizo autorizado, incumpliendo la legislación vigente, hasta que fue interceptada en las proximidades de Cabrera, según el ministerio fiscal.

La travesía se inició sobre las ocho de la tarde del 4 de febrero de 2024 desde una playa cercana a Boumerdés (Argelia). La precaria embarcación se quedó sin combustible durante la navegación y uno de los ocupantes alertó a los servicios de emergencias ante la inactividad del acusado. El 6 de febrero al mediodía, Salvamento Marítimo y la Guardia Civil rescataron a los migrantes.

Sin suficiente agua ni comida

La barca no cumplía con ningún estándar de seguridad marítima internacional, sobrepasaba el límite de capacidad de pasaje, no disponía de chalecos salvavidas, ni radio ni radar, GPS, bengalas, motor auxiliar ni remos. Todo ello, unido a las insuficientes reservas de agua y comida, determinó un grave riesgo para la vida e integridad de los pasajeros, que podrían haber desaparecido en alta mar o bien haberse ahogado o sufrido hipotermias severas.

El sospechoso supuestamente patroneó la patera a cambio de una remuneración económica, siendo el encargado de manejar la nave desde Argelia hasta las costas españolas. El trayecto había sido organizado por personas no identificadas asentadas en Argelia, que cobraban a cada adulto ocupante unos 3.000 euros por la travesía.