La alcaldía compartida, escollo para el acuerdo entre PSOE y Més en Pollença

Pollença deparó una de las pocas noticias positivas para la izquierda de la isla el pasado 28 de mayo. El candidato socialista, Martí March, actual conseller de Educación en funciones, fue el más votado, con la posibilidad de formar con sus seis concejales mayoría con Més (cuatro ediles), liderado a nivel local por la también diputada Joana Aina Campomar. Sin embargo, a pocas horas del acto de constitución del Ayuntamiento, no hay ningún acuerdo cerrado. Uno de los principales obstáculos es la negativa de los socialistas a compartir la alcaldía con Més.

«Manifestamos cierta sorpresa al ver que la alcaldía compartida haya sido una exigencia para poder avanzar en la negociación de un nuevo gobierno progresista con amplia mayoría por primera vez en muchos años, y no se haya querido entrar en todo lo que comporta una nueva hoja de ruta política para el municipio», sostuvieron en un comunicado los socialistas, que hicieron hincapié en que el PSOE obtuvo el 28M los mejores resultados de un partido político en Pollença «desde 1999», ganando «en 12 de las 15 mesas electorales».

Los socialistas pollencins aseguraron que su negociación con Més se ha centrado en ejes fundamentales como las propuestas de «máxima prioridad» para el municipio; la definición de un organigrama de áreas y la «distribución y retribución» de quien se encargaría de gestionar estas áreas «en función de los resultados y el peso de cada formación».

«Los resultados de las elecciones fueron muy claros y la suma de las dos candidaturas progresistas alcanzaron un resultado ampliamente mayoritario de 10 regidores del total de 17 representantes del Consistorio, que determinan una proporción del 60% y del 40%, respectivamente», argumentó, por su parte, Més en un mensaje publicado en sus redes sociales

«La representatividad»

«Desde Més per Pollença, durante estas semanas, hemos transmitido a los socialistas las medidas que consideramos necesarias para nuestro municipio, al mismo tiempo que consideramos ineludible que la representatividad se traslade a todo el ámbito del acuerdo de gobernabilidad a fin de dar máxima estabilidad al cambio durante los próximos cuatro años», agregó la formación ecosoberanista.

Més no cerró las puertas a alcanzar un acuerdo en las próximas horas. «Hemos hecho propuestas de acuerdo con ilusión y ganas. Además, continuaremos trabajando hasta el pleno de investidura del próximo sábado para garantizar un gobierno progresista, estable y de amplia mayoría, con un equipo cohesionado que respete la proporcionalidad de la responsabilidad que nos otorgó la ciudadanía a través de las urnas, del 60% y del 40%, respectivamente», sostuvo este partido.

En esa misma línea, los socialistas de Pollença subrayaron también que no cierran las puertas a alcanzar un «buen acuerdo para una mayoría progresista», aunque dejan abierta la posibilidad a gobernar en minoría «con responsabilidad y buscando acuerdos y consensos con todas las fuerzas políticas». Además de PSOE y Més, los otros partidos que obtuvieron representación en Pollença el 28M son: Tots-El Pi (cuatro ediles), PP (2) y Unió Mollera Pollencina (un concejal).

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