Las casas expropiadas en 2018 para ampliar Aragó están okupadas

La ampliación de la calle Aragó a la altura del Vivero y Son Rul·lan está paralizada y las casas que el Ayuntamiento expropió para ello en 2018 están okupadas. Los vecinos de la zona han reclamado a Cort que estos inmuebles se vacíen y se derriben para no dificultar más el ensanche de esta vía, previsto en el plan de movilidad urbana, pero también para evitar problemas de seguridad y salubridad.

En noviembre de 2018, el Ayuntamiento aprobó destinar 680.000 euros a expropiar siete fincas, con un total de 2.239 metros cuadrados situados entre las calles Camí de Can Foradí y Camí de Can Roses. «Permitirá ampliar la anchura de la calle Aragó en uno de los tramos que quedaban pendientes y, por tanto, en este trozo se podrá desdoblar la calle», manifestó el actual alcalde en ese momento. Precisamente en Can Foradí está previsto que finalice un tramo del carril bici que debe unir Palma con Marratxí y que fue presentado el pasado viernes.

Sobre la ampliación de la calle, de momento, el área de Movilidad no tiene ninguna actuación prevista y a Gobierno Interior tampoco le ha llegado la notificación de que esas casas expropiadas estén okupadas. «Ahora está en manos de Modelo de Ciudad porque es quien tiene que hacerse cargo de la ampliación del vial. Cuando se notifique que están okupadas, el área de Gobierno Interior iniciará el expediente de desahucio», afirman fuentes de esta regiduría.

Sin embargo, el 30 de septiembre de 2019, la asociación de vecinos de Son Fuster Nou-Palmeres registró una petición en el propio Ayuntamiento reclamando que se limpiara la zona a medida que se iba expropiando. «El incremento de ocupaciones que con este escrito denunciamos hace todavía más urgente una efectiva actuación por parte del Ayuntamiento».

Para la ampliación de este tramo de la calle Aragó queda pendiente el acuerdo con Defensa para el tramo de Son Rul·lan, de propiedad de los militares.