Los médicos de Baleares sufrieron 27 agresiones en 2023, un 29% más

En el conjunto del país fueron 769 ataques, uno cada dos días, y 2 de cada 3 tuvieron a facultativas como víctimas | Mañana se celebra el día europeo contra las agresiones a facultativos y profesionales sanitarios

El policía enlace Alfredo Rodríguez junto a la gerente del Colegio de Médicos de Baleares, Marian Fuster.

El policía enlace Alfredo Rodríguez junto a la gerente del Colegio de Médicos de Baleares, Marian Fuster. / COMIB

I. Olaizola

I. Olaizola

El Colegio de Médicos de las Illes Balears (COMIB) ha informado hoy de que las 27 agresiones a facultativos que registró en su observatorio el año pasado suponen un incremento del 29% sobre los 21 ataques que se produjeron en 2022.

Con motivo de la celebración mañana, 12 de marzo, del día europeo contra las agresiones a médicos y profesionales sanitarios, la Organización Médica Colegial (OMC) que aglutina a los 52 colegios de médicos de todo el país reveló asimismo que en 2023 se comunicaron 769 ataques a sanitarios, dos actos violentos en cada jornada del calendario. Esta organización subrayó que dos de cada tres agresiones las padecen facultativas siendo el perfil mayoritario de estas acciones una médica de Atención Primaria.

El 22,2% de los casos registrados en Baleares fueron agresiones de tipo físico con resultado de lesiones, un 33,3% amenazas y un 44,4% insultos. Los ataques a mujeres supusieron en las islas el 37% del total. En 2023 se produjeron 3,89 agresiones por cada mil colegiados, por encima de la media naciona (2,52 por cada mil).

El ámbito de Atención Primaria (AP) recibió el 26% de las agresiones registradas; en Hospitalaria, el 30%; en Urgencias de AP sucedió el 15% y en Urgencias Hospitalarias el 7,5% de los casos registrados por el COMIB. El 70% de los agredidos lo fue en el sector público y el 29% en el privado. Respecto a las causas de la agresión, el 59,1% fueron por discrepancias con la atención y el 22,7% por informes no acordes a las pretensiones del paciente. 

Un leve repunte de los ataques en los servicios de Urgencias, que casi la mitad de los agresores eran pacientes programados y que en el 60% de los casos el desencadenante de las agresiones fueron las discrepancias sobre la atención que estaban recibiendo y que un 13% de las mismas supusieron una baja laboral del profesional agredido, fueron otros de los datos desgranados por la OMC sobre los 769 ataques de 2023, el segundo mayor registro desde la creación del observatorio de estos hechos.

Por su parte, el Col·legi Oficial d’Infermeres i Infermers de les Illes Balears (COIBA), reclamó a todas las instituciones pertinentes que se aumenten las acciones de prevención de manera urgente, tanto para asegurar la protección de los profesionales mientras trabajan como para concienciar a la ciudadanía.

El COIBA recordó que durante 2023 las enfermeras de Baleares sufrieron 369 agresiones, más del doble que las 143 denunciadas en 2021.