Vox señala al conseller de Educación: "Siembra la duda sobre si se implantará la libre elección de lengua"

Vox abandonó ayer el búnker en el que llevan instalados desde el pasado miércoles para cargar contra el conseller de Educación, Antoni Vera, al que consideran como principal culpable de que no se concrete cómo se va a aplicar la libre elección de lengua en los colegios de Baleares: «Ha hecho algunas declaraciones en las que siembra la duda».

Su portavoz, Idoia Ribas, acudió a la tertulia matinal de IB3 Radio -una cadena que quieren clausurar-, después de varios días sin comparecer ante los medios de comunicación, para lamentar que el titular de Educación confirmara al Moviment per l’Escola en Català a les Illes -incluye a sindicatos como STEI o Alternativa Sindicat Docent―que no separarán a los alumnos por aulas según la lengua en una reunión celebrada la semana pasada.

Ribas asegura que «tenemos dudas» de si la fórmula para la implantación de la libre elección de lengua «va a ser satisfactoria para Vox» después de las palabras de Vera ante los sindicatos y recuerda a la presidenta del Govern, Marga Prohens, que para tener estabilidad durante los próximos cuatro años necesitan que tanto el Ejecutivo como el PP «cuente con nosotros en absolutamente todas las actuaciones que lleve a cabo durante la legislatura» porque no gobierna con mayoría absoluta: «Necesitarán siempre los votos de los ocho diputados de Vox».

Desde Vox consideran que, «para que nadie pueda pensar que el PP está jugando nosotros» -el vicepresidente del Govern, Antoni Costa, ya dejó claro que es «evidente» que hace una semana había más confianza entre ambos partidos-, la única posibilidad real es establecer una hoja de ruta «clara y definida» sobre cómo y cuándo se va a aplicar la libre elección de lengua: «No sé si el señor Vera pretende poner pinganillos a los niños como hace Armengol en el Congreso».

En este sentido, Ribas afirma que no entienden las «reticencias» del PP a aprobar la propuesta íntegra de Vox y culpa a los populares de lo ocurrido el pasado martes en el Parlament: «Hubo una falta de previsión porque sabían que nosotros, sin tener aclarado este tema, no íbamos a aprobar un techo de gasto».

El PP, en cambio, reitera que solo tienen una propuesta: «Garantizar la libre elección de lengua en Infantil y Primer Ciclo de Primaria para el curso 2024/2025 en los centros que sea posible» y «extender la libre elección de lengua en todas las etapas educativas a partir del curso 2025/2026 y, en todo caso, antes de que acabe la legislatura, sin excluir ninguna de las dos lenguas oficiales».

El pleno de hoy en el Parlament estará marcado por las preguntas sobre el catalán, con una ofensiva total de la oposición para tratar de arrinconar al Govern y dos preguntas de Vox, una de Ribas y otra de la diputada Manuela Cañadas: «¿Señora Prohens, considera que los gobiernos deben imponer a las familias en qué idioma deben estudiar sus hijos?» y «¿Cómo piensa la conselleria calendarizar la libre elección de lengua según el acuerdo suscrito con Vox?».

El Govern se impacienta ante el ala dura de Vox: «No pactamos imposibles»

Madrid rechaza la crisis

A pesar de que la división interna en el grupo parlamentario de Vox es una realidad, el secretario general del partido a nivel nacional, Ignacio Garriga, expresó ayer que no existe ninguna «crisis» tras el rechazo de su formación al techo de gasto del PP. Además, rechazó una rebelión en el seno del grupo parlamentario.

Según recoge Europa Press, desde el partido de Santiago Abascal reiteran que no existe crisis ni tampoco «desencuentro» y subrayan que la «recuperación de la libertad lingüística» en Baleares «está pactada» y, de hecho, condicionan la calendarización de la elección de lengua a «desencallar» la aprobación del techo de gasto.

El secretario general defiende que «la única crisis de Baleares» es la que tiene lugar «en las sedes de la izquierda y el separatismo» porque «nunca un Govern balear ha logrado más en cien días» y asevera que «esa es la verdadera crisis que sufren cuando Vox entra en los gobiernos». El dirigente de la ultraderecha pone como ejemplo la eliminación del Impuesto de Sucesiones o la rebaja fiscal.

En la rueda de prensa, Garriga se negó a explicar los motivos del cese de Cardona, alegando que es una pregunta que hay que hacer al grupo parlamentario balear. Eso sí, señala que la situación allí es de «normalidad absoluta». Desde el partido restan importancia a estos acontecimientos e indican que entra dentro de lo normal que haya debates entre los miembros de los grupos parlamentarios de cara a votar las diversas iniciativas.