Nueve millones de fondos europeos para camas elevables en los hoteles de Baleares están en peligro

Urge que se publique la convocatoria para pedir las subvenciones y seguir con la sustitución de los mecanismos, solo se han repartido 6 millones de la partida de 15 millones

Si se destinan a otro proyecto, no habría tiempo de ejecutarlos, advierten los socialistas

Una camarera de pisos hace una cama con mecanismo elevable en un hotel de Mallorca.

Una camarera de pisos hace una cama con mecanismo elevable en un hotel de Mallorca. / Bernardo Arzayus

Myriam B. Moneo

Myriam B. Moneo

Las camas elevables fueran la estrella inicial de la ley Negueruela, el primer anuncio que hizo el Govern de Francina Armengol de una reforma de la norma que después incluiría la moratoria de plazas turísticas, entre otras medidas. Y volvieron al estrellato en la precampaña electoral, cuando la entonces candidata del PP Marga Prohens las tachó de «la mayor tontería en política turística de los últimos años». Un mes y medio después de que la presidenta asumiera su cargo en el Consolat de Mar, reina la incertidumbre sobre si estos mecanismos seguirán siendo obligatorios en los hoteles. Mientras, desde las filas socialistas se advierte que hay 9 millones de fondos europeos que se pueden ir al traste si no se publica cuanto antes la segunda convocatoria para que los hoteleros soliciten las subvenciones para las camas.

A finales de noviembre pasado se puso en marcha la primera convocatoria para que los hoteleros cambiaran las camas. El presupuesto ascendía a 15 millones de euros correspondientes al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado con fondos europeos Next Generation. En el reparto por islas, en virtud de las plazas turísticas, a Mallorca le correspondían el 77 % de la partida, 11,6 millones. La estimación del Ejecutivo Armengol fue que se modernizarían alrededor de 80.000 camas en el archipiélago, a razón de 380 euros máximo por unidad. 

Pasados los tres meses de plazo para presentar las solicitudes, no se había agotado la partida. Así pues, el anterior Govern lo amplió hasta finales de abril para dar margen a los hoteleros. Aun así, solo se presentaron 602 expedientes, y se concedieron casi 6 millones en subvenciones. Quedó un remanente de 9 millones.

El Govern del Pacto y las asociaciones hoteleras acordaron que se publicaría una convocatoria anual para comprar camas elevables en virtud de su obligatoriedad marcada en la ley de Turismo, recuerda Rubén Castro, exsecretario general de la conselleria de Turismo que lideró Iago Negueruela. 

Los plazos corren

«Como el nuevo Govern no publique la convocatoria lo antes posible, no va a tener tiempo de ejecutar» el presupuesto, advierte el socialista. Una vez que termine la temporada alta, sería a partir de octubre y noviembre cuando los hoteleros empezarían con su instalación. «Antes se debe publicar» la base reguladora de la convocatoria de ayudas. 

Los plazos de los fondos europeos corren y se pueden perder. «En diciembre de 2024 deben estar totalmente ejecutados», dice Castro, conocedor del intrincado proceso de la financiación que llega de Bruselas. Insiste en que antes de que finalice este año debería estar en marcha la convocatoria. En caso contrario, el Ejecutivo de Prohens «no va a tener tiempo para hacer los trámites y la justificación» de la partida, que debería ir resolviendo el año que viene. Así consta en el profuso informe que la extinta conselleria de Modelo Económico, Turismo y Trabajo heredó al actual Govern sobre el estado de los fondos europeos destinados a la modernización y competitividad del sector turístico. Castro advierte que si no se lleva a cabo y los fondos UE se pierden «será por inacción suya».

El Govern de Prohens sigue sin aclarar si en su ley de Turismo estos mecanismos serán obligatorios

Está por ver qué va a decidir el Govern sobre la obligatoriedad de cambiar las camas de los hoteles para mitigar el esfuerzo de las camareras de piso. Desde el Ejecutivo de Marga Prohens se ha dejado claro que se levantará la moratoria turística y se va a recuperar la bolsa de plazas con una nueva ley turística que quiere recuperar «el espíritu» de la ley Delgado. 

Sobre este asunto el conseller de Turismo, Cultura y Deportes, Jaume Bauzà, se ha limitado a decir que escuchará las propuestas del sector. A partir de septiembre se inician las comisiones para elaborar la futura ley. Sí fueron claros, tras reunirse con Bauzà, los hoteleros manifestando que muchos ya habían optado por cambiar las camas, y que consideran que la medida «no hay que imponerla».

«Mentiras» socialistas

El colectivo Kellys Unión Baleares ha advertido que «si no se cumple la ley turística con las camas elevables, nos vamos a movilizar». Negueruela echó en cara al Govern del PP que «ya se ha metido en un lío con las kellys» porque su «intención» es cambiar la obligatoriedad de las camas. Y esta misma semana el portavoz del PP en el Parlament, Sebastià Sagreras, acusa al PSOE de «hacer oposición con fake news». «No vamos a permitir —critica— que se viertan mentiras sobre posibles cambios en la ley de Turismo para intentar hacer creer que las kellys van a verse afectadas». Sin embargo, su partido sigue sin aclarar que harán en la futura norma con las camas elevables. 

El socialista Castro asegura que si que elimina su obligatoriedad el remanente de 9 millones se perderían porque para ir a otro proyecto «tendrían que modificar el convenio» firmado entre el Gobierno central y el autonómico.

SIN SECRETARIO GENERAL EN TURISMO, CLAVE PARA GESTIÓN DE LOS FONDOS EUROPEOS

La conselleria de Turismo aún no ha cubierto la vacante de secretario general. Es un puesto «clave para la gestión de los fondos europeos», afirma Ruben Castro, quien ocupó el cargo en el anterior Govern, tras sustituir a Jaume Colom, cuando fue nombrado presidente de la Autoridad Portuaria. Con el Govern de Prohens, Bartomeu Alcover ocupó el puesto, pero después ha sido nombrado director general de Presupuestos en la conselleria de Economía, Hacienda e Innovación.

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