La aceituna de mesa mantendrá el mismo precio que en 2022 y se fija en 4 euros el kilo

Miquel Gual explica que tras cuatro años de malas cosechas, la de este año será radicalmente distinta

La aceituna de mesa mantendrá el mismo precio que en 2022 y se fija en 4 euros el kilo

La aceituna de mesa mantendrá el mismo precio que en 2022 y se fija en 4 euros el kilo / Joan Mora

El consejo rector de la cooperativa agrícola Sant Bartomeu ha fijado los precios que abonará en la próxima temporada por la aceituna de mesa que se mantendrán sin cambios respecto a la temporada del año pasado.

Según ha informado el presidente de la institución, Miquel Gual, para este ejercicio se prevé que la cooperativa abone 3 euros por kilo de aceituna verde, mientras que para la negra, la que ya está madurada, su precio alcanzará los 4 euros por kilogramo. Gual ha recordado que estos precios son los máximos que abonará la cooperativa para el producto de mayor calidad. Es decir, si la aceituna que se entregue para su comercialización no cumple con los requisitos máximos, el precio será inferior al establecido. Se trata, por otro lado, un criterio que se viene fijando y cuyo objetivo es fomentar la producción de calidad de aceituna en la Serra de Tramuntana. Esta aceituna se dedicará al consumo de mesa en sus tres variantes: verde entera, la ‘trencada’ y la negra.

Por otro lado, el máximo responsable de la institución informó que próximamente se convocarán a los productores de aceitunas a una reunión en la que se dará cuenta de los precios fijados para la próxima temporada que arrancará el próximo mes de octubre.

La aceituna de mesa mantendrá el mismo precio que en 2022 y se fija en 4 euros el kilo

La aceituna de mesa mantendrá el mismo precio que en 2022 y se fija en 4 euros el kilo / Joan Mora

Campaña de gran calidad

Si las condiciones meteorológicas no son adversas, la Serra de Tramuntana está a las puertas de una excelente campaña de producción de aceituna. Ello dará pie una buena campaña tanto de elaboración de aceite de oliva virgen como la aceituna envasada entera.

Miquel Gual explicó que tras cuatro años de malas cosechas, la de este año será radicalmente distinta. Entre otros factores, las lluvias recogidas durante los meses de invierno y primavera pasados han propiciado que los olivos vayan cargados de fruto, pese a los desastres que dejó tras de sí el temporal Juliette que causó cuantiosos daños en numerosos olivares de la Serra de Tramuntana.