Fútbol. Primera División
Real Mallorca: Algo más que la permanencia en juego
El club recibiría en estos momentos cuatro millones de euros del reparto televisivo por ser decimosexto
El equipo bermellón ingresó diez millones en la Liga 2022-23 por ser noveno al final del campeonato

Samú Costa, jugador del Real Mallorca / RCDM
Redacción
El Real Mallorca afronta los últimos cinco partidos de la temporada con la calculadora en la mano. Jugadores y cuerpo técnico, porque están seis puntos por encima del descenso a falta de 15 en juego tras el valioso empate cosechado en Cádiz y hacen sus cálculos sobre cuándo sellarán la permanencia. Y en las oficinas, porque están pendientes de la posición final en la Liga –ahora son decimosextos– para saber cuánto dinero ingresarán en total de la televisión.
El Mallorca se clasificó noveno la pasada Liga, una posición que permitió al club ingresar unos diez millones de euros. Una cantidad, la que se percibe en total por la televisión que la temporada anterior fue de 44’51, la menor de todos los equipos de Primera División (tras aplicarse diversos ajustes).
Esta campaña la situación del Mallorca en la tabla es bastante peor que en la anterior y los ingresos por televisión se verán reducidos, ya que la diferencia entre quedar noveno (se percibe un 3%, sobre los 10 millones) y quedar decimosexto –actual posición del equipo de Javier Aguirre– es de unos seis millones de euros (percibiría un 1’25%, casi 4’5 millones).
Por esa razón, en las oficinas de Son Moix están muy interesados en que la plantilla no sólo consiga la permanencia, sino que lo haga además clasificándose en la mejor posición posible. A grandes, la diferencia es de un millón de euros por puesto.
Todo un premio para clubes como el Real Mallorca, que tal y como está estipulado el reparto del dinero de la televisión necesita clasificarse al menos en la mitad de la tabla para mejorar sus opciones de reforzarse.
¿Cómo se reparte el dinero de la televisión?
LaLiga percibirá alrededor de 1.500 millones de euros. Esta cantidad se divide en dos partes, repartiéndose la mitad (unos 750 millones) de forma equitativa entre todos los equipos (serían alrededor de 36 millones por club).
La otra mitad se vuelve a dividir en dos partes. Una (la más complicada de calcular) se reparte en función de lo que LaLiga denomina ‘implantación social’ del equipo; es decir, se toman en cuenta los ingresos por ticketing de las últimas cinco temporadas y las audiencias de los partidos para el reparto del dinero.
Y el 25 % restante se decide en función de la clasificación final del equipo. Se aplica un porcentaje según el puesto: el campeón se lleva un 17%; el subcampeón, un 15%; el tercero, un 13%, y así sucesivamente. Hasta los tres últimos: un 0’75%, 0’50% y 0’25% del colista.
Y es de esos aproximadamente 350 millones de euros que componen el 25% a repartir por la clasificación final en la Liga donde el Mallorca va a perder ingresos con respecto a la campaña anterior, en la que el equipo de Javier Aguirre fue noveno.
Esta temporada, con cinco partidos aún por jugarse -el primero este sábado contra el Atlético de Madrid-, el once bermellón podría aún pelear por la duodécima plaza; una posición que le daría al club unos ocho millones (cuatro más de los que recibiría en estos momentos siendo decimosexto).
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