Cort cerrará el quiosco de prensa de la Rambla y trasladará el de Sindicat a la plaza de l'Olivar

Cambios en el mapa de los quioscos de prensa de Palma. El Ayuntamiento convocará en breve el concurso para renovar la concesión de estas instalaciones con algunas novedades de calado: cerrará el que se ubica en la esquina de la Rambla con la calle del Jardí Botànic. El quiosco de la puerta de Sant Antoni con Sindicat se trasladará a la cercana plaza de l’Olivar y, por primera vez en Palma, contarán con un cajero automático para sacar dinero en efectivo.

El departamento de Hacienda, Función Pública y Govern Interior que dirige Mercedes Celeste ultima el decreto que ordenará este ámbito y renovará la concesión. La idea es que la nueva empresa que los gestione subrogue a los actuales trabajadores.

El quiosco de la Rambla no volverá a operar con la nueva adjudicataria. Cort ha tomado la decisión de eliminarlo por razones de accesibilidad, ya que ocupa una esquina muy transitada y deja poco espacio a los peatones. También alega motivos estéticos ahora que el muro del convento de Santa Magdalena ha sido limpiado de pintadas vandálicas a iniciativa de la Fundación Forteza-Rey.

Finalmente, y pese a tratarse de un emplazamiento muy concurrido, no resulta rentable, a diferencia del resto.

De este modo, Palma conservará cinco quioscos: el de plaza Progrés, plaza España, plaza del Mercat, plaza Joan Carles I y puerta de Sant Antoni, en la desembocadura de la calle Sindicat.

Este último sufre frecuentes episodios de vandalismo, por lo que la actual infraestructura se retirará y se habilitará un punto de venta en una instalación ya existente en la plaza de l’Olivar y que se reconvertirá. El Consistorio considera que en este nuevo emplazamiento sufrirá menos daños y le favorecerá su proximidad al mercado.

Otra de las grandes novedades es que, por primera vez, los quioscos de prensa de Palma incluirán cajeros automáticos ATM, algo más pequeños que los de los bancos, que ofrecerán la posibilidad de sacar dinero en efectivo.

En otras ciudades ya se ha ensayado la instalación de estos dispensadores. La idea es dinamizar los quioscos ofreciendo un nuevo servicio a los clientes, en un momento además en el que los bancos cierran oficinas y los cajeros automáticos están en retroceso. En todo caso, su actividad principal seguirá siendo la venta de periódicos y revistas.

4.500 euros de canon

La nueva concesión establecerá un canon de alrededor de 4.500 euros anuales para cada quiosco por la ocupación de la vía pública. Asimismo, el Ayuntamiento incluirá en las nuevas condiciones que los trabajadores que están a su cargo se subroguen a la nueva concesionaria, que gestionará las cinco instalaciones. El plazo de la nueva adjudicación será de seis años más otros cinco prorrogables.

La actual adjudicataria, Nova Área, gestiona los seis quioscos de Palma desde 2010. En agosto de 2022 amagó con abandonar y cerrarlos porque expiraba el plazo de la concesión, pero después de alcanzar un acuerdo con el Ayuntamiento siguió adelante de manera provisional hasta la convocatoria de un nuevo concurso público al que no tiene intención de presentarse.

Cort espera que la nueva concesión ordene una actividad que desde hace tiempo opera en precario, al igual que las concesiones de las playas, los locales de s’Escorxador, el bar Alaska o los quioscos de flores de la Rambla, hasta que fueron adjudicados a una nueva empresa el pasado mes de enero.

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