Consulta aquí el nuevo reglamento lingüístico de Calvià con el que el catalán deja de ser la "lengua usual"

El BOIB publica este martes la nueva norma que regula el uso de las dos lenguas oficiales

Calvià castellaniza los tipónimos

Calvià castellaniza los tipónimos / DM

El catalán deja de ser la «lengua usual» del ayuntamiento de Calvià, 35 años después de que la corporación aprobase el primer reglamento de normalización lingüística. El BOIB publica este martes el nuevo Reglamento Municipal para el uso de las lenguas oficiales, tanto la catalana como la castellana, en el Ayuntamiento. Así, el Consistorio presidido por el alcalde Juan Antonio Amengual (PP) que gobierna junto a Vox podrá emplear ambos idiomas de forma indistinta para comunicarse con otras administraciones de Balears, para anunciar eventos municipales o para rótulos informativos en la vía pública.

En el preámbulo de la norma, el equipo de gobierno calvianer justifica la revisión del reglamento de 1988 argumentando que “después de más de 25 años, los cambios sociolingüísticos y demográficos experimentados en Calvià, con la enseñanza de lenguas oficiales desde las primeras etapas educativas, con un tercio de la población de origen extranjero y el progreso tecnológico, hacen necesaria la revisión de toda la normativa referente a la utilización de las lenguas oficiales de Balears en el ayuntamiento de Calvià». El objetivo es «garantizar la libertad de los ciudadanos en el uso de las lenguas oficiales cuando se comunican con el Ayuntamiento».

Así las cosas el nuevo reglamento se aplicará en todos los servicios, departamentos, oficinas, empresas y fundaciones públicas, órganos desconcentrados y también los descentralizados. Además, también será de aplicación a todas las personas físicas y jurídicas que gestionen servicios municipales.

La finalidad, recalca el artículo 3 de la norma, es “garantizar el derecho de los ciudadanos a dirigirse al Ayuntamiento de Calvià en cualquiera de las dos lenguas oficiales y obtener respuesta en la misma lengua utilizada. También, señala, el artículo, pretende “promover el uso de la lengua propia en la relación entre el ciudadano y la administración local”.

Discriminación

El reglamento también deja claro que su aplicación “no podrá comportar ningún tipo de discriminación a los ciudadanos por razón de la lengua que usen para dirigirse a la administración municipal. Así todos los modelos oficiales para la ciudadanía estarán en las dos lenguas. En cuanto a la organización municipal, el punto cinco determina que las actuaciones internas se podrán redactar en cualquier de las dos lenguas.

El artículo seis deja claro que se debe cumplir el artículo 14 de la Llei de Normalitzación Lingüística de les Illes Balears y todos los topónimos del término municipal de Calvià “tienen como única forma oficial la catalana”, algo que no cumple el Ayuntamiento que castellaniza en algunas de sus comunicaciones topónimos oficiales del municipio, entre ellos el de Peguera, que lo convierte en Paguera. De igual forma, el perfil oficial de la administración en X, antes Twitter, junto al encabezado de Ajuntament de Calvià ha incorporado esta legislatura el de Ayuntamiento de Calviá, con el acento cerrado. Los cambios respecto a la nomenclatura tradicional se hacen visibles sobre todo en algunas de las comunicaciones escritas en la versión en castellano, no así en las redactadas en catalán, donde se respeta la forma normativa. Además de los casos de Paguera y Calviá, el Ayuntamiento se refiere también en ocasiones a Santa Ponsa, en vez del normativo de Santa Ponça.

Rótulos

Otro de los cambios que implementa el reglamento publicado este martes en el BOIB es que las dependencias y los servicios municipales tendrán como nombre oficial el catalán y el castellano. Así, rótulos, carteles e indicadores estarán en las dos lenguas oficiales, igual que los rótulos de las vías públicas.

En cuanto a la tramitación de los expedientes, la Administración la realizará en cualquiera de los dos idiomas oficiales y en casos que por alguna razón justificada se requiera, serán bilingues. Las certificaciones se harán en el idioma que solicite el interesado mientras que las comunicaciones o notificaciones “se podrán redactar en cualquier de las dos lenguas sin prejuicio del derecho de los ciudadanos a recibirlas en el idioma oficial que lo soliciten”.

En castellano se redactarán los oficios y escritos dirigidos a autoridades, organismos y dependencias de entidades públicas de territorios donde el catalán no sea la lengua oficial.

La información de carácter informativo se redactará en las dos lenguas. La promoción y difusión de las actividades municipales a través de anuncios en medios de comunicación o publicidad se podrá hacer en cualquiera de las dos lenguas, incluso, se podrán utilizar lenguas internacionales si se considera necesario para una mejor promoción.

La producción editorial y los carteles y mensajes que se emitan en los medios podrán ser también en cualquiera de las dos lenguas.

Finalmente, se creará una comisión de seguimiento que se reunirá una vez al año para seguir el cumplimiento de este nuevo reglamento, que deroga el anterior.