El piromusical de sa Pobla por Sant Antoni rendirá homenaje póstumo a Jaume Caldés

El espectáculo "Piromusical" de sa Pobla que se ofrece la noche de la víspera de Sant Antoni, y que este año cumple su vigésimo quinta edición, rendirá homenaje póstumo a Jaume Caldés Quetglas, quien fue miembro de la colla de Caparrots durante casi sesenta años y responsable del grupo, hasta que su estado de salud se lo permitió, pocos años antes de su fallecimiento ocurrido el pasado mes de septiembre de 2023, a la edad de 73 años. El diseño pirotécnico y musical que homenajeará a Jaume Caldés correrá a cargo de Tomás Ramis y el de la iluminación será obra de Pedro Marcé.

De Jaume Caldés (sa Pobla 1950) se puede decir que dedicó toda su vida a la colla de caparrots. A los 15años, en 1965, debutó con el grupo encarnando a uno de los personajes llamados guardias. Son dos y no bailan, si no que pasean seriamente haciendo un recorrido de ida y vuelta como si vigilaran como actúan el resto de los componentes de la colla. Dos años después, ya bailó encarnando a uno de los payasos, y por allá el año 1970, por decisión del entonces alcalde sa Pobla Rafel Serra Company "Tianet", cargó con la responsabilidad de incorporar a nuevos integrantes al grupo y a enseñarles y dirigirlos a actuar.

Personaje de Grouxo

Pocos años más tarde, empezó a bailar como Grouxo, el personaje más simpático y querido del grupo y que actúa como maestro de ceremonias, hasta que el año 1999, con su salud algo deteriorada, decidió dar paso a personas más jóvenes, sustituyéndole en su cargo y en su papel su hijo Tomeu, que sigue al frente del grupo. No obstante, Jaume siguió vinculado muy de cerca con los caparrots, ejerciendo, desde la barrera, como se diría en términos taurino, de 'mestre dels Caparrots'.

Como reconocimiento a la aportación a uno de los actos más representativos y queridos de la fiesta de Sant Antoni de sa Pobla, Jaume Caldés fue proclamado clamater que lanzó el sentido grito de "Visca Sant Antoni!" en las solemnes Completes del año 2015, distinción que supuso para él un gran honor. Esta noche, después del baile de los caparrots, que lucirán brazalete negro en señal de luto, cuando la casa consistorial, esté envuelta por las llamas del piromusical, Jaume Caldés, desde donde esté, marcará los pasos de Grouxo con la misma entrega e ilusión que lo hizo durante tantos años.