El informe del Govern sobre Can Morató se basa en un plano equivocado

El departamento de Recursos Hídricos habría tomado como referencia un mapa que ubica la antigua fábrica a unos 150 metros de su localización real

Imagen aérea de la fábrica de can Morató. A la izquierda se aprecia el torrente de Sant Jordi.

Imagen aérea de la fábrica de can Morató. A la izquierda se aprecia el torrente de Sant Jordi. / D. M.

Joan Frau

Joan Frau

El informe de la dirección general de Recursos Hídricos que ha motivado la resolución que deniega el proyecto de reforma de Can Morató se basa en un plano que ubica la antigua fábrica de tapices de Pollença a unos 150 metros de distancia de su localización real. Este será uno de los argumentos que incluirá Colonya Caixa Pollença en el recurso de alzada que tiene previsto presentar contra la resolución del Govern que impide por ahora la reforma del edificio catalogado en el que la caja de ahorros quiere ubicar su nueva sede social y de la Fundació Guillem Cifre de Colonya.

En este sentido, el director general de la entidad ‘pollencina’, Biel Bauzá, explica que el mapa sobre el que se ha basado el informe que concluye que la fábrica está ubicada en una zona inundable «presenta un problema de escala que impide concretar con definición la ubicación exacta del edificio». Al parecer, en este documento Can Morató aparece sobre la rotonda de Can Berenguer, ubicada a unos 150 metros de la antigua factoría.

Este desajuste podría ser determinante en la decisión adoptada por la dirección general de Recursos Hídricos porque las condiciones de la ubicación donde este departamento sitúa la fábrica de Can Morató son diferentes a las existentes en la localización real. Un ejemplo de ello es que entre el edificio catalogado y el torrente existen unas paredes de contención que no figuran en el plano utilizado por el Govern para elaborar el informe técnico, por lo que se habría considerado que el inmueble estaría menos protegido frente a una crecida de agua

La intención de Colonya Caixa Pollença es elaborar unos nuevos planos de la zona mucho más precisos que los que ha tomado Recursos Hídricos como referencia. Se utilizarán las nuevas tecnologías como los drones para «ajustar más la escala», señala Bauzá, porque «ahora las vistas aéreas tienen mucha más precisión». Ingenieros externos ya trabajan en la elaboración del recurso de alzada que debe presentarse en el plazo de un mes en el que Caixa Colonya ha depositado las esperanzas para revertir la situación y lograr un dictamen favorable.

100 años sin inundaciones

Otro de los argumentos que baraja la entidad es que la historia le da la razón porque no se ha registrado ninguna inundación de la factoría desde que esta empezó su actividad industrial, en 1922, hasta que se clausuró de forma definitiva, en 1967.

El director general de la caja de ahorros explica que hay constancia, hace más de 50 años, que el antiguo puente ubicado junto a la fábrica se había visto superado por el agua en situaciones excepcionales. «El puente antes tenía tres arcos con tres o cuatro pilares y era más fácil que se produjeran atascos de agua», apunta. Sin embargo, hace 50 años este puente se sustituyó por otro viaducto que permite una mejor fluidez del agua que baja por el torrente y desde entonces no se han producido atascos ni el cauce se ha desbordado. Además, ahora el puente es perpendicular al torrente, mientras que antes estaba inclinado.

Otro factor que dificultaría una posible inundación de las instalaciones de Can Morató en caso de torrentada es que entre la fábrica y el torrente «hay unos 20 metros de encinar», concluye Bauzá.

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