El restaurante del museo es Baluard de Palma obtiene el permiso definitivo para terminar las obras sobre la muralla

La comisión de Patrimonio detalla a la empresa adjudicataria, el grupo Tragaluz, las correcciones que tiene que introducir en el proyecto

El promotor necesita también la autorización del Ayuntamiento de Palma, titular del emplazamiento de la muralla, para retomar las obras

VÍDEO: El nuevo restaurante del museo es Baluard de Palma cuando fueron paralizadas las obras en septiembre de 2023

Miguel Vicens

Miguel Vicens

Miguel Vicens

Con diez votos a favor, dos en contra y una abstención, la comisión de Patrimonio del Consell de Mallorca ha otorgado este martes la autorización definitiva al restaurante del museo Es Baluard para que termine las obras sobre la muralla de Palma, que la propia institución insular paralizó el pasado septiembre, al detectar graves deficiencias tras una denuncia de ARCA.

La finalización de las obras, que promueve el grupo de restauración Tragaluz, está sujeta, no obstante, al cumplimiento de una serie de prescripciones. El Consell, por una parte, rechaza el proyecto legalización presentado por la empresa para retomar las obras, pero por otra le permite finalizar la intervención si se ciñe a la que el departamento de Patrimonio aprobó en julio de 2022, durante la pasada legislatura, de la que se desvió en su ejecución.

La ejecución del proyecto no podrá fijar ningún elemento sobre el pavimento histórico de la muralla, declarada Bien de Interés Cultural, ni anclajes, ni mortero ni tampoco cemento. Tampoco podrá instalar una barra de bar sobre el espacio destinado a mesas y sillas. En ningún caso se le permitirá anclar sobre la muralla toldos y las bases deberán contar con una capa separadora sobre el pavimento. Se prohíbe, asimismo, que el espejo de agua a piscina supere los quince centímetros de profundidad y su base no puede ser de hormigón, sino de materiales secos que no precisen obra y no afecten al pavimento histórico.

Por otra parte, las aguas pluviales deberán conectarse con la red pública y en ningún caso con la acequia de la antigua muralla. Las jardineras y escalones no se podrán rematar con chapa metálica pintada de negro y deberán limitarse a una utilizar madera de colores terrosos que se integren con el conjunto. La acequia del trazado de la antigua muralla no se puede tapar con cristal, ya que no se ha presentado el detalle de esta intervención.

La única novedad respecto al proyecto de 2022 es que se autoriza una conexión de gas del restaurante con la prescripción de que se realice un control arqueológico durante su ejecución.

La empresa adjudicataria necesita también para retomar las obras el permiso del Ayuntamiento de Palma, que es el titular del espacio donde su ubicará el nuevo restaurante.

Archivo - ARCA votará en contra de la modificación del proyecto de las terrazas en el Baluard de Sant Pere

Imagen de la terraza del restaurante del museo Es Baluard de Palma / ARCA

Apertura del restaurante en abril y más de 600.000 euros de inversión

El grupo Tragaluz, que preside Tomás Tarruella ganó el concurso público para la adjudicación del bar restaurante del museo el 6 de septiembre de 2021, firmando el contrato en mayo de 2022 con la Fundación Es Baluard.  Desde esa fecha paga un canon de 8.500 euros mensuales, después de suscribir una garantía de 1.300.000 euros por cinco años de concesión.

Además, en la obra, la empresa de restauración ya ha gastado una cantidad superior a los 600.0000 euros, que es la suma que ha invertido en la renovación total de la cocinas y los baños del restaurante, ubicados en las dependencias interiores del museo, así como en las nuevas instalaciones eléctricas. 

El nuevo restaurante del museo Es Baluard, cuya apertura está prevista para el próximo abril, tendrá una capacidad para 150 comensales, cincuenta de ellos en el interior, en los dos pabellones modulares colocados junto a la muralla, y cien más en la terraza exterior. Su plantilla estará formada por entre 40 y 50 personas. Y su diseño es obra de la interiorista Sandra Tarruella, con la intervención del paisajista Pepote Comella.