Los precios para la compra de un piso en Mallorca tienden a estabilizarse

Tras años de fuertes subidas en los precios, el valor de las viviendas de segunda mano tiende a estabilizarse, y su evolución durante 2024 será similar al de la inflación, moviéndose entre el 3% y el 4%, según se pronostica desde el Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de las islas.

Su vicepresidenta, Natalia Bueno, vincula este hecho al descenso detectado durante 2023 en la adquisición de inmuebles en Mallorca, tanto por parte de clientes nacionales como extranjeros. Esta estabilización coincide con la anunciada hace pocos días por la Agrupación Balear de Servicios Inmobiliarios (ABSI).

Hay un aspecto que se señala como clave, y es la intensa subida de los tipos de interés impulsada por el Banco Central Europeo y el encarecimiento que eso supone de las hipotecas, lo que dificulta que muchas familias puedan acceder a la adquisición de un inmueble usado y está haciendo que aumente la presión sobre el mercado del alquiler.

Aval del Govern

Además, lamenta que el aval que el Govern aplica sobre el 20% del precio del inmueble está teniendo muy poco impacto, ya que solo se concede en las residencias cuyo precio no supere los 270.000 euros. Natalia Bueno apunta que son pocas las viviendas que están en el mercado por debajo de ese valor, y en muchos casos se trata de construcciones en mal estado que precisan de muchas reformas, lo que hace inviable su adquisición por parte de familias de clase media.

Palma presenta un perfil algo diferenciado por la elevada demanda que registra, y se señala que sus precios podrían elevarse algo más que en el resto de la isla, pero sin alcanzar los niveles de ejercicios anteriores.

Vivienda nueva

Mucho más difícil de prever es la evolución que va a tener el precio de la vivienda de nueva construcción, aunque su peso en el mercado de compraventa es minoritario respecto a la usada, según reconoce el presidente de la asociación de promotores inmobiliarios de las islas (Proinba), Luis Martín.

Para empezar, aunque ha habido compras de suelo, buena parte de las empresas están a la expectativa ante la bajada en las ventas registrada en 2023.

Sin embargo, un recorte en los tipos de interés y una reactivación de las economías europeas puede hacer que la demanda vuelva a crecer y, ante la escasez de producto en el mercado, su valor se vea impulsado de nuevo al alza, añade Martín.

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