La ‘fuga’ de viviendas en alquiler agrava el problema residencial de Mallorca

Los propietarios optan por vender el inmueble o dedicarlo solo a alquiler de temporada para evitar problemas con los inquilinos al no poder ejecutar desahucios

Las dificultades para encontrar vivienda en alquiler se agravan en la isla

Las dificultades para encontrar vivienda en alquiler se agravan en la isla / B.RAMON

Fernando Guijarro

Fernando Guijarro

El problema residencial que padece Mallorca se está viendo notablemente agravado por la salida del mercado de inmuebles que tradicionalmente habían estado en el mercado del alquiler permanente, al optar sus propietarios por la venta aprovechando un momento de precios altos o por ofrecerlos solo como residencia de temporada, según coinciden en subrayar tanto la vicepresidenta del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de las islas, Natalia Bueno, como el presidente de la asociación balear de promotores inmobiliarios (Proinba), Luis Martín. El motivo es la inseguridad que generan las medidas del Gobierno central para blindar a los inquilinos, como el bloqueo a los desahucios en el caso de las familias vulnerables, según señalan ambos, al tiempo que acusan a la Administración de no afrontar con sus propios recursos un problema social y trasladar esa responsabilidad a los dueños del inmueble.

Así, Natalia Bueno se pregunta si es lícito obligar al titular del piso a estar un año sin cobrar el alquiler sin ningún tipo de ayuda pública, un argumento esgrimido igualmente por Luis Martín, a lo que éste añade que la situación creada está haciendo que grupos inversores con proyectos de residencias para alquilar estén dando marcha atrás a la hora de impulsar este tipo de iniciativas.

Un aspecto que destacan los representantes del sector inmobiliario es el enorme peso que actualmente está soportando el mercado del alquiler en la isla. Para empezar, la cifra de vivienda nueva que se pone en marcha es mínima, según reconoce Martín, lo que hace que sea la usada la que acapara la inmensa mayoría de las operaciones de compraventa que se registran en Mallorca.

Además, la subida de los tipos de interés está frenando las posibilidades de adquirir una residencia de segunda mano, ante el fuerte endeudamiento que supone firmar una hipoteca, sumado a que ésta solo cubre el 80% del valor del inmueble, lo que obliga a disponer del 20% restante.

Presión sobre el alquiler

Eso está provocando que cada vez más personas se vean abocadas a buscar un piso para alquilar. Pero ese aumento de la demanda se ve acompañado de una reducción en la oferta, haciendo que la tensión en este mercado no deje de crecer. Eso explica que la previsión de evolución de sus precios durante el presente ejercicio siga siendo notablemente alcista.

En este aspecto, la vicepresidenta del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria subraya que cada vez es más habitual que el propietario de alguna de esas residencias pida al inquilino que la abandone alegando que va a ser ocupada por un hijo, ante los problemas que éste tiene a la hora de acceder a cualquier otro inmueble.

Otro fenómeno que se está detectando es que, junto a la salida del mercado del alquiler estable de viviendas que pasan a ofrecerse solo por temporada o para la venta, el filtro que aplican los propietarios a la hora seleccionar a sus inquilinos es cada vez más estricto, algo que está perjudicando de una forma especialmente intensa a algunos colectivos, según lamenta Natalia Bueno.

De este modo, cada vez existe un mayor nivel de rechazo hacia las personas de clase media baja, ante el temor a que puedan tener problemas para pagar la renta y no poder desahuciarlas en estos casos, y en este sentido la representante de los API lamenta que entre ese grupo de afectados se encuentran mujeres sin pareja y con hijos.

Del mismo modo, señala que cada vez es más habitual que los titulares del inmuebles suscriban pólizas de garantía de alquiler con aseguradoras.

Natalia Bueno pone de relieve que «no se puede legislar sin tener en cuenta la opinión de los profesionales de un sector, y en este caso el Gobierno hizo una legislación a su bola». Sobre este punto, recuerda que el Ejecutivo estatal no aceptó reunirse con el presidente del Consejo General de Colegios de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de España, Gerard Duelo, para abordar estos temas.

Alquileres al alza

En este contexto, la vicepresidenta del colegio balear de API pronostica que durante el presente año el valor de los alquileres se elevará en Mallorca entre un 10% y un 15%, manteniendo la tendencia alcista de los últimos años. Sobre este punto, señala que la combinación de un elevado número de familias en busca de una residencia en alquiler, y la existencia de una oferta de pisos cada vez más reducida, genera este tipo de situaciones.

Natalia Bueno advierte que Palma merece un análisis separado, dado que además de registrar la mayor concentración de la demanda, presenta zonas en las que ya resulta muy difícil que una familia local pueda hacer frente a este gasto, al no encontrarse nada con dos o tres habitaciones y aparcamiento por debajo de los 1.400 euros mensuales, una oferta a la que solo pueden acceder extranjeros, cuyo límite en el precio se mantiene entre los 2.000 y los 3.000 euros al mes, o una pareja nacional en la que trabajen los dos y ambos con salarios superiores a los 2.000 euros.

Eso hace que haya barrios en los que es difícil que se registren incrementos en los precios tan acentuados, pero debido a que éstos se encuentran en niveles máximos.

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