La UIB denuncia a la Policía la desaparición de los tres cuadros extraviados

La UIB ha presentado esta mañana una denuncia policial por la desaparición de tres obras de arte que son propiedad de la Universitat y cuyo paradero en estos momentos se desconoce. Esta denuncia se ha formalizado la misma mañana en la que el rector de la UIB, Jaume Carot, acompañado por la vicerrectora de Projecció Cultural, Magdalena Brotons, han presentado la pintura del artista Miquel Barceló, que también desapareció, pero que se ha podido recuperar gracias a la acción altruista de una mujer, que lo compró en el año 2000 y que lo ha devuelto sin recibir nada a cambio, solo pidiendo que se mantuviera su anonimato.

El artista Miquel Barceló regaló esta obra en el año 1988 a la UIB dentro de la campaña ecologista para evitar la urbanización de los terrenos de sa Canova de Artà. El cuadro, sin que se conozcan todavía las circunstancias, terminó en una galería de arte de Palma, que hoy ya no existe, y se puso a la venta por 10.000 euros. La pintura la adquirió esta mujer anónima, que hace poco pretendía ponerla a la venta de nuevo en una galería de Madrid, pero al descubrirse que era un cuadro que pertenecía a la UIB, renunció a su venta y optó por devolverla a su original propietario. La pintura está en buen estado, aunque tiene una pequeña grieta en uno de sus lados, que tendrá que ser reparada. La UIB ya se ha puesto en contacto con un restaurador para que repare esta pequeña grieta y después se enmarcará. En principio está previsto que la obra quede colgada en el despacho del propio rector, Jaume Carot.

La dueña del cuadro de Barceló que desapareció lo devuelve a la UIB

Precisamente, Carot ha señalado, al igual que ya lo hizo el pasado viernes, que existen muchas dudas de que esta obra de Barceló, al igual que las tres pinturas que han desaparecido, llegaran a entrar en algún momento en la universidad. Carot ha sido especialmente cariñoso con la mujer que ha devuelto la pintura, señalando que ella no sabía que se trataba de un regalo que había realizado Barceló a la UIB. “Se mostró avergonzada al enterarse de lo ocurrido”, ha señalado el rector, que ha detallado que la compra de la obra en la galería de Palma ya desaparecida se realizó en el año 2000, dos años después de que fuera pintada y regalada a la UIB.

VÍDEO | La UIB presenta públicamente la obra de Miquel Barceló que había desaparecido

La UIB reconoce que sobre los otros tres cuadros desaparecidos, que pertenecen a los artistas José María Sicilia, José Manuel Broto y Xavier Mariscal, tampoco existe un documento oficial que acredite que llegaron a entrar en la Universitat, por lo que tampoco existía una catalogación oficial sobre las obras.

El rector ha reconocido que “solo existen sospechas” sobre el posible paradero de los tres cuadros que aún faltan por recuperar, una información que ha sido facilitada a la Policía en la denuncia que se ha presentado esta mañana. Carot confía en que la Policía empiece a trabajar y que las obras se puedan recuperar.

Carot ha vuelto a señalar que se sabe quién fue la persona que hace 35 años (cuando se regaló la pintura) era la responsable del patrimonio artístico de la UIB. Sin embargo, no ha querido revelar su identidad, debido a que no existe ninguna constancia de que esta persona, que ya está jubilada, tuviera algún tipo de responsabilidad en la desaparición de estos cuadros. En cualquier caso, los responsables universitarios ya han hablado con ella, aunque se desconoce la versión que ha facilitado.

El rector de la UIB sobre las obras extraviadas: “No hay constancia de que los cuadros hayan entrado nunca en la UIB”

La vicerrectora Magdalena Brotons ha reconocido que en los últimos periodos ha existido un cierto descontrol sobre el patrimonio artístico que pertenece a la Universitat. De hecho, hace unos años se reveló que había desaparecido una gran parte del legado artístico de la UIB, un dato que fue desmentido por Brotons, señalando que se trataba de errores en la catalogación de estas pinturas, ya que muchas veces no se informaba de los cambios de ubicación de las obras, por lo que no se sabía dónde estaban colgados. La responsable universitaria ha señalado que el actual equipo directivo de la UIB está trabajando para poner orden sobre este descontrol y se está realizando un control mucho más exhaustivo sobre el patrimonio que es propiedad pública de la Universitat.

Brotons también ha señalado que esta misma mañana la UIB ha informado a Miquel Barceló que su obra ha podido ser finalmente recuperada, si bien la información se la ha trasmitido a través de otra persona.

Los responsables de la UIB han insistido en que tienen mucho interés en conocer de qué forma esta pintura realizada por el artista de Felanitx pudo llegar a la galería de arte de Palma, sin que nadie se enterara de ello.

Carot ha reconocido que tuvo conocimiento de esta situación a finales del pasado mes de enero. La pista surgió al descubrirse, desde el entorno de Barceló, que esta obra se iba a vender en una galería de Madrid. A partir de ese momento los responsables universitarios empezaron a trabajar para descubrir qué había pasado. Se contactó con los otros tres artistas, que también participaron en la campaña a favor de la defensa de sa Canova, que señalaron que habían regalado sus obras a la UIB.

De los seis cuadros que fueron regalados, además del de Barceló, la UIB solo tiene colgado en sus paredes los que regalaron Antoni Tàpies y Miguel Ángel Campano.