Un ‘variat’ de artistas en un animado Art Palma Brunch

Más de 60 creadores en 35 galerías y centros expositivos protagonizan la 19 edición del evento primaveral de Art Palma Contemporani, donde aficionados y profesionales del arte han llenado los espacios culturales

La galería Aba Art Lab este sábado en el Art Palma Brunch

La galería Aba Art Lab este sábado en el Art Palma Brunch / Guillem Bosch

Raquel Galán

Raquel Galán

El variat gastronómico de tota sa vida se ha convertido para los modernos en un brunch y, como de arte contemporáneo se trata, los galeristas ofrecieron este sábado un buen combinado de exposiciones con gran diversidad de creaciones durante la animada 19 edición del Art Palma Brunch.

También fue heterogéneo el visitante que llenó los espacios culturales privados y los públicos que se han adherido, ya que además de profesionales y aficionados a las artes visuales, entre ellos numerosas familias y jóvenes, se sumaron turistas que ya empiezan a abarrotar las calles de Palma. Y si no que se lo digan al galerista Xavier Fiol, que tuvo que explicar a un grupo de rusos la individual Terrain Vague, de Tomás Pizá. Fue uno de los más de 60 artistas que mostraron su obra en 35 centros de exhibición, 12 de ellos las galerías asociadas a Art Palma Contemporani.

Los visitantes extranjeros tal vez vieron cuadros de palmeras desde el exterior de la galería de la calle Sant Jaume y pensaron: «Esto es muy mediterráneo». En el interior, el artista detalló a los asistentes que le preguntaban que «las palmeras se implantaron en los años 50 y 60 en los barrios de la periferia», como el barcelonés analizado por él, la Pau, donde «también se desarrolló un tipo de arquitectura vinculada al movimiento moderno cuando llegó la inmigración», según añadió sobre los elementos de una propuesta artística que ha completado con textos de Le Corbusier.

Exposición de Tomás Pizá en la galería Xavier Fiol

Exposición de Tomás Pizá en la galería Xavier Fiol / Guillem Bosch

Artista emergente

Conversaciones profundas se alternaban con la degustación de panades en el citado local o coca dulce con Laccao y limonada con mandarinas en Aba Art Lab. Allí estrenaron la primavera con la primera individual de la artista Rosa Caterina Bosch, Focs i Fonts, quien también se ha nutrido de su entorno y «ha innovado llevando al arte contemporáneo el proceso natural de utilizar pigmentos de los árboles caídos», en palabras de la galerista Alejandra Bordoy. Con ellos ha teñido las telas que cuelgan del espacio situado en la plaza Porta Santa Catalina, con un puput, «guardián de los bosques», en una de ellas y polinizadores en las piezas que ha creado con la técnica del collage.

Además de arte y aperitivo, en algunas galerías también hubo música en directo, como la que tocó el dúo formado por Toni Cuenca y Nermin Goenenc en la Pelaires, abarrotada al mediodía. El reputado artista Pep Girbent, que expone en la planta baja, no paró de recibir alabanzas por sus Recent paintings, incluidas las de su colega Susy Gómez, que esta vez no acudió como creadora (lo fue durante la pasada Nit de l’Art), sino como visitante. La muestra de la planta noble la protagoniza Gabriel Pericàs y su particular Processionària, que «es siempre un acontecimiento primaveral teñido de cierta angustia y ansiedad social», como dice Cristina Anglada, la comisaria, y que no dejó indiferente a nadie.

Pep Girbent en la galería Pelaires

Pep Girbent en la galería Pelaires / Guillem Bosch

Tampoco lo hicieron las sillas, taburetes y el balancín de 2Monos (Nicoletta Mantoan y Alejandro Dumon) en la galería Pep Llabrés. El diseño se codea con el arte y «estas esculturas con utilidad son para sentarse, pensar y cabecear», destaca el galerista. Sin embargo, en la silla de madera y cuerda de Dona asseguda, una de las piezas de Tomeu Ventayol en el Solleric, solo puede descansar la figura de hierro a la que hace referencia el título. El espacio municipal ha apostado por una retrospectiva de las abstracciones geométricas del artista mallorquín, además de por las Perpetual Mutation de Tony Oursler, uno de los creadores de videoarte más destacados de los últimos tiempos.

La colectiva de la galería Baró, Disobedient Bodies, también se centra en artistas internacionales, todas mujeres relevantes en este ámbito y que «tienen el coraje de redefinir la feminidad dentro de sus respectivas culturas», entre ellas la afgana, peruana, balinesa, venezolana y griega. Por su parte, la L21 inauguró exposición de la fotógrafa artística Pixi Liao y más allá del casco antiguo de Palma también está la Tube Gallery con Rafa Forteza. En total, más de 60 artistas que no solo pudieron ser visitados ayer, ya que las muestras permanecerán hasta el próximo evento de los galeristas, cuando llegue el verano. Quienes quieran conocer las actuales a fondo, la asociación llevará a cabo visitas guiadas gratuitas en abril y mayo en castellano, catalán e inglés.