"Cort se equivoca en sus primeras decisiones respecto la cultura": Illescena muestra su indignación tras los cambios en las programaciones

La Associació d'empreses balears d'arts escèniques ha denunciado una "mala praxis" por parte de los nuevos gobiernos municipales después de la oleada de cambios y cancelaciones que ha vivido el sector en España

Las tres obras de teatro y la película de Pixar cancelados esta semana.

Las tres obras de teatro y la película de Pixar cancelados esta semana. / EPC

"Una sociedad sana necesita cultura. Si la primera acción del departamento de Cultura del Ajuntament de Palma es censurar un espectáculo con unas explicaciones tan poco coherentes y contradictorias mal empezamos. Ante este intervencionismo de nuestras administraciones, el sector de la cultura se plantará y exigirá explicaciones", denunció ayer Illescena en un comunicado, tras la cancelación de tres funciones de Nua: Radiografia d'un trastorn.

Las diferentes versiones

La obra de Ann Perelló ha sido la primera en verse afectada por el cambio de gobierno en la isla: las representaciones acordadas con el Teatre Mar i Terra se suspendieron, según Cort, por "cuestiones presupuestarias, pero la compañía compartió ayer en su cuenta de Twitter una versión diferente de la historia. Según la Sala Flyhard, desde la Regiduría de Cultura del Ajuntament de Palma les comunicaron a última hora -cuando solo quedaba formalizar el contrato- que la anulación de los acuerdos se debía a un cambio en "la línea de la programación" para la próxima temporada. Unas contradicciones que han llevado a empresas culturales como Illescena a manifestarse en contra de la gestión del nuevo equipo.

"Todo esto que parece un poco para reír es muy grave. La política no debería intervenir en los temas tratados más allá de asegurar los medios para que la cultura se pueda desarrollar de forma libre e independiente", sentenciaron desde la Associació d'empreses balears d'arts escèniques. "El departamento de cultura del Ayuntamiento de Palma debería entender que no puede plantear una programación que entre en competencia con el sector privado. El entretenimiento 'puro' no requiere el apoyo ni el cuidado que una sociedad sana debería de destinar a la cultura".

Reprogramación de 'Nua'

Rafel Brunet, director general de Música y Artes Escénicas del Ajuntament de Palma, reculó hace unos días diciendo que reprogramarían Nua en el Teatre Xesc Forteza, con más actuaciones y pases escolares. Una medida que si bien han valorado positivamente los implicados, Illescena ha considerado insuficientes: "Esto provoca una grave indefensión de la cultura que, frente a acciones unilaterales intervencionistas como éstas, queda con los gastos realizados y ninguna compensación económica, además del agravio de perder otros oportunidades de trabajo en las fechas previstas".

Oleada de cambios en la cultura con PP y VOX al frente

En una semana, en España se han suspendido tres obras de teatro y una película infantil en cuatro ayuntamientos gobernados por el Partido Popular. En dos de ellos, Vox está al frente del área de Cultura. La primera cancelación fue la de Orlando, la obra de Virginia Woolf de 1928 sobre una viajera del tiempo que experimenta las dificultades de ser mujer a lo largo de la historia. La concejalía de Cultura de Valdemorillo, dirigida por Vox, fue el primer caso de "censura" en España tras las elecciones autonómicas. Al trabajo de la autora feminista del siglo XX, le sucedió la obra de El mar: visión de unos niños que no lo han visto nunca, anulada en Briviesca, Burgos, donde gobierna el PP con el apoyo de Vox y Ciudadanos, y la obra de Ann Perelló, en Palma, sobre los trastornos de la alimentación. Además, la gran pantalla no se ha librado: la localidad cántabra de Santa Cruz de Bezama, donde legislan PP y Vox, retiró la película infantil Lightyear, de la saga Toy Story, de un ciclo veraniego en la plaza del pueblo, porque en ella aparece una relación entre dos mujeres.