El pesquero ´Valle de Elda´ se hundió ayer a 27 millas al suroeste de Formentera, sobre la una de la madrugada, tras arder en alta mar durante ocho horas. Salvamento Marítimo, que movilizó la lancha ´Salvamar Markab´, con sede en Ibiza, no pudo evitar que el buque se fuera a pique debido a la entrada de agua en el casco y la deformación de la embarcación. Uno de los marineros fue trasladado al hospital Can Misses en helicóptero y el resto fue socorrido por el velero con bandera en las Islas Caimán ´Endeavour´, aunque toda la tripulación se encuentra en buen estado de salud.

Un incendio en la sala de máquinas desencadenó la tragedia y toda la tripulación se vio obligada a saltar por la borda y a refugiarse en una lancha neumática.

Uno de los marineros heridos, de 50 años de edad y nacionalidad española, se produjo un profundo corte en el labio al golpearse contra el aro salvavidas con el que se lanzó al agua, aunque recibió el jueves el alta médica. Además, el jefe de máquinas, de 47 años y también español, que llegó al puerto de Ibiza con quemaduras de segundo grado en las piernas y brazos, también recibió el alta hospitalaria el jueves, a las 21.15 horas, según confirmó el hospital Can Misses.

Pérdida "incalculables"

"Estamos agotados. Fue horrible, todo pasó muy rápido", declaró a su llegada a Dénia el capitán del pesquero, Elías Domenech, que confirmó que volverán a trabajar en el mar: "No sabemos hacer otra cosa". Las doce personas que formaban la tripulación del ´Valle de Elda´ fueron trasladadas en un barco de Baleària a Dénia y llegaron ayer a las 14.30 horas.

El armador del barco, José Ruso, aseguró que todos se encuentran bien, aunque las pérdidas materiales son «incalculables»: «Hemos perdido toda la pesca, unos 120.000 euros en quisquillas. El valor del barco es como el de una casa, no se puede calcular. Además, es nuestra herramienta de trabajo? todo se ha perdido», repetía Ruso. El barco venía de pasar tres meses pescando en Italia.

El armador afirmó ayer que el nasero hundido es la "única" embarcación que poseía y que "desconoce" hasta qué punto se hará cargo de las pérdidas el seguro. Sin embargo, indicó que tenía toda la documentación en regla, ya que de otra manera "no podría salir a faenar". "Esto no es como un barco de viaje. Aparte del barco y de la mercancía, en el fondo del mar hay muchas herramientas de pesca muy caras. Lo más importante es que todos se encuentran bien y que no hay que lamentar nada peor", matizó José Ruso.