Los once tripulantes del pesquero Valle de Elda recogidos por el velero Endeavour tras el incendio que se inició en la sala de máquinas llegaron el jueves por la tarde visiblemente afectados al puerto de Eivissa y ayer regresaron a Alicante. Las llamas envolvieron la embarcación en una bola de humo en cuestión de minutos. "No sabemos qué ha pasado. Todo ha comenzado en la sala de máquinas, en el tubo de escape. Ha sido cuestión de segundos, no hemos tenido tiempo para nada", destacó aún aturdido Gerónimo, uno de los marineros. El pesquero se hundió ayer en alta mar tras ocho horas ardiendo.

Uno de sus compañeros tuvo que ser rescatado por un helicóptero y trasladado al hospital con un corte en el labio, que se produjo tras saltar del barco al mar con el salvavidas puesto. "Todos hemos tenido que lanzarnos al agua. Él (el tripulante herido) se ha tirado con el flotador y se ha golpeado en la cara. La marea se lo ha llevado y lo hemos perdido de vista", indicó Gerónimo. Las llamas envolvieron el barco con rapidez. "No podíamos respirar. El fuego ha comenzado en la popa, pero el viento lo llevaba hacia la proa", explicó Pedro. "No sabemos si la mercancía la cubrirá el seguro. Se ha perdido todo", sentenció.