Restaurantes de Sóller reducen el número de mesas por la falta de personal

El sector servicios vuelve a acusar la falta de personal para cubrir la temporada y conformar las plantillas de trabajadores en vistas al verano. Si bien este año los hoteleros han sorteado este problema adelantándose en la contratación de los trabajadores para formar su organigrama, el problema se ha trasladado a otros sectores vinculados al turismo, especialmente al de la restauración, según ha asegurado el presidente de los hoteleros de Sóller, Lluís Rullán.

Y es que si bien los hoteles han podido conformar sus plantillas para evitar el problema que se dio el año pasado abriendo contrataciones a principios de año, el problema se ha trasladado a algunos restaurantes del valle donde lo están teniendo difícil para encontrar camareros, ayudantes o cocineros.

De hecho, las bolsas de ofertas de trabajo están llenas de oportunidades laborales que ahora mismo no tienen quien las atienda. La situación ha hecho que algún establecimiento haya tenido que reducir el número de mesas para poder atender a sus clientes.

Dar vacaciones

Los hoteleros iniciaron entre enero y marzo el cierre de contratos con nuevos trabajadores, aunque algunos establecimientos no abrieron hasta pasado un tiempo. Rullan explicó que algunos empresarios se vieron en la tesitura de contratar y automáticamente darles las vacaciones, «ya que era la única manera de asegurarnos los trabajadores y evitar los problemas del año pasado», en un verano en que los hoteles tuvieron que capear la temporada con numerosas carencias de personal.

Los hoteleros también hicieron más atractivas sus ofertas ofreciendo alojamiento a los trabajadores de temporada de nueva incorporación. Precisamente, la carestía de vivienda se ha convertido en los últimos años en un problema añadido para las empresas turísticas de Sóller.

Las dificultades de acceso a la vivienda derivadas de la falta de oferta y los altos precios de los alquileres, se ha convertido en un hándicap para los trabajadores, ya que muchos de ellos se han visto en la tesitura de tener que rechazar ofertas de trabajo en Sóller ante la imposibilidad de encontrar un lugar en el que vivir y mucho más a un precio mínimamente asequible.

Precisamente esta situación hizo que hace unas semanas la patronal de la restauración de Sóller tocara a las puertas de la conselleria de Movilidad del Govern para instar a ampliar los horarios del servicio de bus.

Con esta petición se buscaba que los trabajadores que residen fuera de Sóller pudiesen tener transporte público para devolver en casa después de la jornada laboral. Movilidad amplió el servicio de autobús hasta la medianoche. Se trata de una medida que en el verano pasado ya se puso en práctica de forma experimental y cuyo objetivo era dar una salida a los jóvenes que, especialmente los fines de semana, se desplazan hasta la capital balear en busca de ocio ante la falta de oferta que hay en Sóller.

Falta de viviendas

La hotelera Llum Castañer explicó recientemente a este diario que la falta de vivienda hace que muchos de los trabajadores del sector se vean obligados a residir en otros municipios, algo que supone tenerse que desplazar hasta Sóller para incorporarse a sus puestos de trabajo.

Los altos costes de los carburantes hace que para un trabajador le sea poco rentable desplazarse en coche a diario a Sóller para faenar. La alternativa es el transporte público. Por eso, hoteleros y restauradores pedían al Govern que este año se volviese a ampliar los horarios del bus hasta la medianoche y que, además, lo hiciese en estas fechas para que los trabajadores del sector tuviesen medios para desplazarse desde su lugar de residencia hasta Sóller. Con esta medida, hoteleros y restauradores del valle querían garantizar a sus empleados una alternativa de transporte ante la imposibilidad de muchos de ellos de poder acceder a una vivienda cerca de Sóller.

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