La raqueta de Rafael Nadal

M. Dolores Vázquez Rovira

Se conocen desde la niñez, las actuales y tantas otras. Las últimas viajaron a Australia y quizá emprendieron ya el camino de vuelta. Quienes puedan o quieran leer esto saben de la nueva lesión de Rafa. Me duele la cadera sin dolor alguno. Se humedecen mis ojos cual si fueran las lágrimas de Mery. Y los pucheros del nin los fotografío con el alma.

Situación difícil. Médicos. Entrenador y preparadores. La raqueta de Rafa es un símbolo en el tenis; una mano que se alarga ante la jugada imposible. El tenista está triste. Yo también. Sus palabras llegan a la sabiduría de un perdedor en la pista que, pese a perecer imposible, deja que su ser triunfe siempre. Por ti y los tuyos, querido Rafa.