El Govern del Pacte no exigió nunca que se justificara el título del catalán en la sanidad

El personal sanitario que optaba a una plaza fija tenía dos años para demostrar el conocimiento de la lengua

A los sanitarios ya no se les exige el catalán para trabajar en Baleares

A los sanitarios ya no se les exige el catalán para trabajar en Baleares

La exigencia del catalán a los profesionales sanitarios fue uno de los temas más polémicas que se generaron durante la anterior legislatura del Pacte de Progrés. Los partidos políticos PSOE y Més alcanzaron en el año 2018 un acuerdo definitivo, que regularizaba el uso y el conocimiento de la lengua catalana en la sanidad pública. El acuerdo fue que todos los sanitarias que optaba a una plaza fija dentro de la administración, y que no disponían de la titulación correspondiente que demostrara sus conocimientos de la lengua propia, tendrían una moratoria de dos años para obtener esta titulación. Si no la presentaban no podrían optar a una plaza fija dentro de la sanidad pública. Fue una medida que se acordó ante el problema que existía en ese momento para cubrir determinadas plazas de médicos especialistas. Este requisito fue eliminado en la actual legislatura.

Sin embargo, según anunció esta mañana Javier Ureña, el director general del Ib-Salut, a ningún profesional sanitario se le llegó a requerir jamás que justificara que había obtenido el título de catalán, a pesar de que habían transcurrido más de dos años desde que se impuso este requisito lingüístico.

Ureña, que esta mañana ha presentado los cursos de catalán que se van a impartir para los profesionales sanitarios, ha asegurado que esta falta de requerimiento supone para los trabajadores una grave situación de inseguridad jurídica hacia los afectados, además de un gran desconcierto por su futuro. 

Futuro incierto

Otro de los graves problemas que ha heredado el actual equipo directivo de Ib-Salut afecta a los 800 profesionales sanitarios que en el año 2022 optaron al proceso de estabilización de sus plazas. En el momento de la convocatoria de las plazas el requisito de la titulación en catalán no era obligatorio. Sin embargo, en pleno proceso se cambiaron las normas y se exigió el título. Solo los sanitarios que estaban en servicio activo podían acogerse a una moratoria para obtener dicha titulación. El resto, teóricamente, queda excluido del proceso de estabilización de las plazas, que debe estar listo antes de final de este año. Ureña anunció que este problema afecta a muchos sanitarios.