Baleares está sin Defensor del Menor tras cuatro meses de Govern de Marga Prohens

Tras cuatro meses de Govern de Marga Prohens, un único alto cargo queda pendiente de nombramiento: el director de la Oficina Balear de la Infancia y la Adolescencia (OBIA).

La Oficina depende de la conselleria de Familia y Servicios Sociales, quien ha indicado a este diario que están barajando aún los posibles perfiles. No se han animado a dar una fecha aproximada o fijar un plazo de cuándo podrían realizar ese nombramiento.

Desde el sector de los servicios sociales relacionados con los menores empieza a comentarse con extrañeza esta ausencia al frente de la OBIA, siendo un cargo ‘atractivo’ para el que no se entiende que falten candidatos, ya que en definitiva supone cobrar como un director general asumiendo menos responsabilidades. Hay quien se muestra inquieto recordando que Vox, socio de investidura del PP, cargó duramente contra la Oficina Balear de la Infancia y la Adolescencia la anterior legislatura.

En varias sesiones parlamentarias el partido ultra clamó por la desaparición de la OBIA, el IB-Dona y la Oficina Anticorrupción. El IBDona se mantiene (aunque el Consell sí ha perdido la dirección insular de Igualdad), el cierre de la Oficina Anticorrupción ya está anunciado y la OBIA sigue sin director. Estos hechos hacen temer a trabajadores relacionados con áreas de menores que la pretensión sea cargarse esta figura (lo que implicaría cambiar la normativa vigente) o vaciarla dejándole sin presupuesto asignado en la próxima ley de presupuestos.

El acuerdo de investidura firmado entre PP y Vox no contempla la desaparición de esta Oficina, pero en el apartado de ‘Eficiencia del Gasto Público’ se incluye un punto que reza: «Contrataremos una auditoría de todos los organismos, empresas y entes públicos y se eliminarán aquellos que no reporten beneficios claros para la ciudadanía y supongan un gasto superfluo, innecesario o duplicado o con fines ideológicos».

La Oficina Balear de la Infancia y la Adolescencia (OBIA) es un órgano que vela por la defensa y la promoción de los derechos del menor que se encuentre dentro del territorio de Baleares, bajo la consideración de que la salvaguardia de los derechos de las personas menores de edad y la sensibilización de la población ante situaciones de indefensión del menor exigen un órgano específico y autónomo en el marco del organigrama administrativo.

Josep Lluís Riera fue el último director de la OBIA, tras suceder en el cargo a Serafín Carballo, que fue cesado por su negativa a vacunarse. En el anterior Govern del PP, con José Ramón Bauzá, ocupó el cargo María Garrido, que ahora ocupa el cargo de directora insular de Familias en el Consell de Mallorca.

Tener ‘Síndic de Greuges’ supondría un defensor independiente

Aunque en general se hable de ‘defensor del menor’ para referirse al director de la Oficina de la Infancia y la Adolescencia (OBIA) administrativamente hablando no serían lo mismo, ya que el responsable de la OBIA en definitiva depende de una conselleria y por tanto del partido en el Govern, cuando la idea es que esta figura se nombre y funcione al margen de los partidos en el poder. La cuestión es que en Baleares aún no se ha legislado para constituir un Síndic de Greuges, a pesar de estar recogido en el Estatut d’Autonomía. El Defensor del Menor sería un cargo adjunto al síndic, y así se blindaría su existencia y se garantizaría su independencia. La ley vigente reza que en ausencia de esta figura, debe existir una oficina como la OBIA para velar por los derechos de los menores. 

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