Catalina Bennasar: «La Inteligencia Artificial evitará al dentista errores con las endodoncias»

La doctora Catalina Bennasar, médica estomatóloga ya jubilada que ejerce labores como docente en la escuela universitaria Adema, es la investigadora principal de un trabajo, en el que también han participado doctores de la UIB y que se ha llevado a cabo en los dos último años, sobre el uso de la Inteligencia Artificial (en adelante IA) para mejorar el abordaje y el tratamiento de las endodoncias. Un estudio que ha estado presente en forma de póster informativo en el Simposio Mundial sobre IA en Odontología organizado por la Harvard School of Dental Medicine que comenzó el pasado viernes, 3 de noviembre. Este periódico la entrevisto días antes.

¿Dónde considera que ha avanzado más la atención de la salud bucodental de la mano de la IA?

En el tratamiento de las caries, en las patologías gingivales, en las endodoncias, en Radiología, en la detección de cánceres y tanto en la teleasistencia como en el trabajo del día a día de una clínica dental. Además, va introduciéndose cada vez más en la investigación y en la educación.

¿Qué aplicación práctica va a tener el estudio que ha realizado durante dos años sobre el uso de la IA en el abordaje de las endodoncias?

Apoyará al profesional a la hora de realizar el pronóstico de la periodontitis apical mediante la IA evitando los errores que se cometen al realizar la evaluación de forma subjetiva.

¿Qué errores son los más comunes?

Determinar si hay lesión o no en el hueso, saber qué pieza dentaria es la que provoca el dolor para hacer el trazamiento.

¿El dolor no viene provocado siempre por la infección?

Por la infección o por una inflamación en el nervio que también lo causa.

En estos casos las opciones son extraer la pieza o matar el nervio…

Sí, tratamientos de conductos o de endodoncia porque dentro de las raíces se encuentran los conductos radiculares donde realizamos el tratamiento de endodoncia.

¿Se va a desplazar hasta Harvard para presentar el póster informativo?

Sí, soy la única que voy a ir.

¿Está ilusionada con su participación en este evento?

Por el viaje, no (risas), pero por lo bien que ha ido el trabajo de investigación, sí. Estamos hablando de un simposio organizado por la mejor universidad del mundo. Esto lo dice prácticamente todo ya que nosotros somos una universidad (Adema) muy jovencita. Entré en ella en el segundo año y he trabajado en un área muy importante como es el uso de la IA en el autismo.

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Sí. La IA ayuda a diagnosticar fácilmente y en menos tiempo el autismo. Normalmente se suelen emplear unas diez horas para un diagnóstico. Sin embargo, con un sistema virtual que usa la IA puede estar en una hora. Luego están los robots, que enseñan las emociones a los autistas o los lentes que llevan incorporado una cámara o un altavoz y les muestran las emociones porque su principal inconveniente es la alteración de su interacción social.