Mallorca reunirá a 450 empresarios de toda España en el Congreso de Hoteleros

La falta de trabajadores en la industria turística, la inteligencia artificial, la circularidad o la formación son algunos de los temas que se llevarán a debate en el XIX Congreso de Hoteleros Españoles, que se celebra por primera vez en Mallorca del 22 al 24 de noviembre y traerá a la isla a unos 450 empresarios de todo el país.

El escenario de la presentación fue, no por casualidad, el aeropuerto de Son Bonet, cuna de la aviación en Baleares y punto de partida de la industria turística en las islas. Allí intervino ayer el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat), Jorge Marichal, que recordó que este congreso es una «cita ineludible» para los hoteleros y para todo el sector en general. El evento pondrá sobre la mesa los principales retos y preocupaciones de la industria, que vive un momento «dulce en el aspecto comercial», aunque urge analizar «qué está pasando con los costes y con la rentabilidad», variables que «permiten a los hoteleros distribuir la riqueza generada entre proveedores y trabajadores», señaló Marichal.

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El presidente de Cehat señaló la falta de trabajadores como una de los principales preocupaciones del sector, un problema que achacó a la «escasez de vivienda» y la «conciliación», y que estará muy presente en el congreso. Insistió en la necesidad de «modernizar el Imserso» y adaptarlo a los cambios de hábitos de los clientes.

El congreso contará con conferencias y mesas redondas en las que los principales representantes del sector turístico español diseñarán las estrategias a seguir. Bajo el lema ‘De más a mejor’, insistieron ayer en la presentación, porque después de la fortaleza que ha demostrado el sector turístico se quiere impulsar mejoras en la calidad de la oferta en destinos maduros. El objetivo es apuntar hacia los valores de los «visitantes cívicos y respetuosos con el entorno y el patrimonio».

Así lo explicó ayer la presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), María Frontera, que incidió en el «carácter camaleónico» del sector turístico y la «capacidad de reacción», una aptitud que contribuyó a que los hoteleros «salieran reforzados» de la crisis sanitaria que afectó a las empresas «en pleno proceso de transformación y reposicionamiento». Igualmente, la dirigente habló de «ambigüedades» propiciadas por normativas que impulsó el anterior Govern y que generan una «inseguridad jurídica» que habría que resolver.

Con todo, Frontera incidió en que entre los 450 asistentes al congreso habrá desde propietarios y directores, tanto de grandes cadenas con presencia internacional como de establecimientos independientes, hasta socios «imprescindibles» de toda la cadena de valor turística en el campo de la tecnología, talento, recursos humanos, riesgos, comercialización o la circularidad. Aun así, explicó la presidenta de la FEHM, la esencia del «carácter mediterráneo» va a estar «muy presente», puesto que el evento será también «una oportunidad para potenciar la cultura».

De cultura como eje del turismo también habló el alcalde de Palma, Jaime Martínez, otra de las principales intervenciones ayer. El primer edil de Cort se mostró «orgulloso» de que la ciudad acoja un evento de este calado y dio la bienvenida como máximo dirigente del Ayuntamiento a todos los hoteleros que visitarán la isla a finales de noviembre. También intervino el director general de Turismo, Pep Aloy, que en primer lugar se disculpó por la ausencia del conseller al estar en una sesión plenaria del Parlament, y el conseller de Turismo del Consell de Mallorca, Marcial Rodríguez, que mostró mucha sintonía con algunos de los empresarios a los que conoce por su trayectoria en el sector.

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