Fútbol

El sueño del Sóller que acabó en pesadilla hace 25 años

Hace un cuarto de siglo, el equipo mallorquín pasó del tercer escalafón del fútbol nacional a la realidad de la Preferente

Varios de los protagonistas recuerdan una temporada que terminó «en tragedia deportiva»

Once del Sóller, en La Antoniana en su visita al Independiente (temporada 1998-99)

Once del Sóller, en La Antoniana en su visita al Independiente (temporada 1998-99) / T. Tenerife

Coincidiendo con las actuales fechas navideñas, hace 25 años, el Sóller había disputado su partido en categoría Preferente frente al Recreativo la Victoria. Sí, en regional. Muy lejos de recintos como el Mini Estadi, Guillermo Olagüe, la Nova Creu Alta, Olímpic de Terrassa o El Clariano entre otros. El CF Sóller había pasado en cuestión de meses de codearse con equipos históricos del balompié español, o el Mallorca B, en el tercer escalafón del fútbol nacional a caerse de bruces en la realidad de una categoría amateur, golpeado por las deudas y sin tan siquiera lucir en sus camisetas de juego publicidad alguna. 

La pregunta es obvia. ¿Cómo llegó a caer tan bajo? Lo sucedido en la idílica población de la Serra de Tramuntana es el más claro ejemplo de lo que no se debe hacer con la gestión de un club. Recordarlo aquí es un buen ejercicio para no volver a caer en la tentación de repetir tal cúmulo de despropósitos.

Días de vino y rosas

Con el padrinazgo del empresario catalán Joan Piguillem (presidente del club), el CF Sóller consiguió hacer historia en la temporada 1996-97. El proyecto deportivo diseñado por el club de la Vall, con una constelación de jugadores del empaque del ya desaparecido Ángel Pedraza, Manolo Molina, José Galindo, Juan Samper, Paco Vera, Julio García, José Luque, Xisco Toro, Edu Serrano, Cristian Graziosi o el gran capitán Tito Tovar, entre otros, comenzó su participación en el grupo balear de Tercera de forma espectacular. De la mano del experimentado Tolo Vich, el equipo funcionaba como un reloj, liderando la clasificación.

fútbol. 1997 98 CF SOLLER (EN LA CAN MAIOL EN PRETEMPORADA)

Formación del Sóller, en la pretemporada de la Liga en Segunda B (1997-98) / T. T.

Una crisis importante de juego y resultados a mediados de la segunda vuelta provocó el relevo en el banquillo. Llegó Nico López. Y con las ideas claras. Era complicado recuperar el liderato, así que preparó el equipo para la liguilla. Acabó tercero con 76 puntos. En la fase de ascenso se encontró como rivales al Cartagonova, Olímpic de Xàtiva y el Barça C. El segundo filial blaugrana (pese a acabar primero) no pudo ascender debido al efecto dominó del descenso a Segunda B del Barcelona B. 

Por tanto, el que quedase segundo cogería la plaza de ascenso. Y esa fue para el Sóller tras superar en la última jornada en Can Maiol al Olímpic. Fueron los mejores momentos de la historia del club solleric. Obtener plaza en la tercera categoría del fútbol español. Nadie sospechaba por aquel entonces que la historia cambiaría de forma radical en cuestión de meses.

Una marcha… y problemas

Pese al éxito deportivo del primer equipo, Joan Piguillem decidió no continuar al mando del club. Antes de su salida, dejó una herencia ‘envenenada’. Jugadores fichados para reforzar el equipo y que posteriormente fueron víctimas de lo que poco después llegó a ser visible y palpable: que no había recursos económicos para hacer frente a sus nóminas

«El presidente, Joan Piguillem, nos abandonó y nos dejó prácticamente a todos sin contratos firmados»

Ramón Jiménez

— Exjugador del Sóller

De los que llegaron para reforzar el equipo, nadie se podía imaginar lo que se estaba cociendo en la Vall. Ramón Jiménez recaló en Sóller procedente del Constància para vivir la experiencia de jugar en Segunda B. Para nada se podía imaginar lo que se encontró: «Al principio, ninguno podía pensar lo que después pasó. El presidente, Joan Piguillem, nos abandonó y nos dejó prácticamente a todos sin contratos firmados. De todo esto tuvimos constancia en Puigcerdà (Girona), donde estuvimos diez días de pretemporada. Ya empezamos la temporada con malas sensaciones».

El Sóller, entrenando en el campo de La Salle. fútbol. Temporada 1997-98

El Sóller, entrenando en el campo de La Salle, con el técnico Nico López en primer plano / Torrelló

Descabezado el club, nadie quería hacerse cargo de la entidad. Y para más inri, sin poder jugar en Can Maiol al ser un campo de tierra. Tocó empezar la liga en el Polideportivo de Magaluf hasta que el césped artificial fuese toda una realidad en Sóller.

Por noviembre, Can Maiol se vistió de color. Y con nuevo presidente. Joan Sellés aterrizó en la entidad para no dejarla sin gobierno. Y pese al oxígeno que supuso la Copa del Rey, cayendo en segunda ronda ante el Real Mallorca (jugándose los dos partidos en el Lluís Sitjar), la realidad era mucho más cruda y real. 

El músculo económico no existía. De hecho, solo se había cobrado la primera mensualidad. Solo una. Comenzaban las quejas tanto del cuerpo técnico como de los integrantes del primer equipo de la Vall. 

De las promesas al caos

Las semanas pasaban, las promesas se iban incumpliendo de forma sistemática, el dinero no llegaba… y al final el caos apareció en el día a día del club. Todo influyó en el rendimiento de los futbolistas. 

«Lo peor era ver a los compañeros que tenían familia y que lo pasaban mal»

Alfonso Muñoz

— Exjugador del Sóller

Alfonso Muñoz, lateral diestro que en su etapa de formación coincidió con Raúl González, Morales, García Calvo, Óscar Tellez, Vaqueriza o Movilla, entre otros, recaló en Mallorca procedente del filial del Atlético de Madrid

A sus 23 años, se encontró con lo peor del fútbol: «Imagínate, uno que se hizo en la cantera del Real Madrid y sale del Atlético para encontrarte tan joven con esto… fue muy ingrato, pero me curtió para todo. Lo peor era ver a los compañeros que tenían familia y que lo pasaban mal». En su caso, el calvario no fue tal «ya que mi familia me respaldó, tenía yo un colchón de ahorro importante. Pero lo pasaba mal viendo a compañeros que no podían pagar la gasolina y entrenaban en Palma porque no podían pagar ni el túnel».

Ramón Jiménez recuerda que «estaban hospedados en un hostal de Sóller, pero si no cobras lo pasas muy mal. Eso sí, en ningún momento se les dejó de lado. Y todos los que éramos de Mallorca les ayudábamos. La directiva, a nivel humano, hacía lo que podía. Y así pasaron el año como pudieron», reconoce. 

«Todo fue muy triste, algunos se fueron antes de acabar la temporada porque no cobraban»

Tito Tovar

— Exjugador del Sóller

Quienes peor lo pasaron fueron los futbolistas locales. En el caso de Alfonso ‘Tito’ Tovar, natural de Sóller y toda una vida ligada al club, contemplaba con estupor lo que sucedía: «Todo fue muy triste, algunos se fueron antes de acabar la temporada porque no cobraban. Tenían que comer en algún sitio, dormían en un hostal… todo muy complicado para uno que viene a una isla y se encuentra esto». «Pese a todo, los que quedaron, cumplieron», señala, destacando el papel que tuvo el técnico, Nico López: «Se acabó la temporada como se pudo; y en ello él influyó mucho, ya que supo mantener el grupo unido ya que al final defendíamos a un pueblo».

fútbol. 98-99. Sóller-Mallorca B. RODRIGUEZ ALBERT LUQUE ALFONSO  MUÑOZ

Rodríguez, Albert Luque y Alfonso Muñoz en el Sóller-Mallorca B de 2ª B / T. Tenerife

El hispanoargentino Cristian Graziosi, delantero que llegó a debutar en Segunda con el Real Mallorca y afincado en la localidad, todavía recuerda con tristeza lo que pasó: «Daba pena ver cómo el club, al que le costó tanto subir a Segunda B por primera vez en su historia, lo pasaba tan mal tanto deportiva como económicamente». «Sin ayuda de nadie, entrenando fuera de Sóller al no tener campo para hacerlo… todo era un desgaste tanto económico como mental y que no estaba recompensado al menos económicamente», explica. «Nos sentimos apartados, dejados», reconoce con crudeza, y sentencia: «Una lástima, de poder vivir un año muy bonito para todos a terminar en tragedia deportiva»

Huelga de entreno y el final

Luchando la plantilla tanto dentro como fuera del terreno de juego, el CF Sóller se mostró como un equipo competitivo. Eso no le bastaba para salir de la zona baja de la clasificación. Nada ayudaba a que se revirtiese la situación. 

«Nos sentimos apartados, dejados»

Cristian Graziosi

— Exjugador del Sóller

Llegados a este punto, cuerpo técnico y plantilla tomaron una decisión que llamó, y mucho, la atención. Desde el lunes 9 de febrero de 1998, la primera plantilla dejó de entrenar. Sólo se presentaría a los partidos, sin apenas preparación para los mismos. Una sesión semanal en Palma, en el Príncipes de España, y a jugar. No quedaba otra. 

Así lo recuerda Alfonso Muñoz. «Hacíamos lo que buenamente podíamos. Al menos queríamos presentarnos, cumplir por nuestra parte y afrontar los partidos con buena cara aunque internamente había compañeros que estaban destrozados», reconoce, y recuerda: «En diciembre me iba al Écija, pero hablé con el entrenador y decidí quedarme hasta el final».

fútbol. 97-98. Segunda B. Sóller-Pájara Playas de Jandía, en Magaluf

Partido contra el desaparecido Pájara Playas en Magaluf / Lorenzo

Deportivamente hablando, fue la sentencia de muerte del equipo en Segunda B. Con todo, el orgullo del deportista les llevó a seguir luchando pese a sus precarias condiciones para salvar la categoría. Y hasta la penúltima jornada no se consumó el descenso. Daba igual. Para los rectores del club era lo de menos con la que ya se les venía encima. 

Reclamaciones judiciales

El plantel no se quedó de brazos cruzados. Denunció al club a través de la AFE, con excepciones contadas como la del propio capitán Tovar, entre otros. Todos cobraron a través del fondo de garantía salarial (FOGASA). La ‘broma’ ascendía a unos 20 millones de pesetas de la época (unos 120.000 euros).

El cuerpo técnico –Nico López, Toni Bujosa y Jaume Caldés– finalmente negoció lo que se les adeudaba con el club (cuatro millones de pesetas; 24.000 euros) evitando la desaparición de la entidad y a su vez propiciando que el CF Sóller continuase su trayectoria, pero ya fuera del fútbol nacional al ser descendido administrativamente a Preferente y con la práctica totalidad de jugadores de la localidad sollerica. Pero eso ya es otra historia.

fútbol. Febrero de 1999. jugadores y técnicos del Sóller en los juzgados

Jugadores y técnicos del Sóller, en los Juzgados en febrero de 1999 / De Toro

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