Nuevo disco de Valtònyc: El rapero mallorquín regresa con 'La tonalitat dels grisos' y un dardo a Gabriel Rufián

Tres semanas después de su regreso a Mallorca, tras permanecer seis años huido de la justicia en Bélgica, y sin anuncio previo, Josep Miquel Arenas, Valtònyc (sa Pobla, 1993) ha regresado también a la música. Y lo ha hecho con la publicación de un álbum de hip-hop titulado La tonalitat dels grisos, que desde el lunes se puede escuchar en plataformas como Youtube y Spotify.

El nuevo disco de Valtònyc reúne nueve temas inéditos los que el cantante mallorquín reflexiona sobre su evolución personal, la escena catalana del rap, el amor, la música y también el compromiso social y político.

Aparece también en las letras una crítica muy concreta y directa al diputado en el Congreso de Esquerra Republicana, Gabriel Rufián, al que ya ha dedicado críticas en redes sociales durante sus últimos años en Bélgica. En esta ocasión se refiere a él en un fragmento del tema Carrers: "Polític ansiolític, de sou pagat per l’estat. Jutjat popular asseurà en Gabriel Rufián”.

El anterior álbum lo había publicado en 2021. Se llamó EPD, lo dedicó a todas las madres del mundo y contó con las colaboraciones de Zoo, Ju, Mi Amargo y Loren D.

FOTOS │Así ha sido recibido Valtònyc en el aeropuerto de Palma

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Condenado a dos años de cárcel

Valtònyc publicó su nuevo trabajo, La tonalitat dels grisos, ayer. Y este martes ha comparecido ante la Audiencia de Sevilla, donde ha aceptado una condena de dos años de cárcel, con conformidad por las partes, por un delito de amenazas graves dirigida contra un determinado grupo de personas.

Se condenan los hechos ocurridos hace cinco años, en 2018, en un concierto en la localidad de Marinaleda donde gritó a su público: “Matad a un puto guardia civil esta noche, iros a otro pueblo donde haya guardias civiles y matad a uno”. También gritó: “Pone una puta bomba al fiscal de una vez”.

El rapero, que regresó a Mallorca a finales de octubre tras cinco años de exilio en Bélgica, reconoció los hechos, aseguró que se arrepentía y consideró que animar al público exhortando a "matar a un guardia civil" fue de "mal gusto", por lo que entiende que haya podido molestar. El rapero tras pedir disculpas aceptó la pena de dos años de prisión más el pago de las costas, aunque no irá a la cárcel, según ha dicho el juez después de que el propio acusado se lo preguntara antes de aceptar la condena.