El grupo municipal del PSM exigió la dimisión del alcalde, Joan Simonet (PP), durante el último pleno por la gestión del centro municipal de actividades ambientales de s´Olivaret. Según el portavoz nacionalista, Mateu Marcús, "en esta cuestión el alcalde no ha defendido los intereses de Alaró, porque la empresa que explota las instalaciones adeuda más de 100.000 euros en concepto de alquiler, intereses y fianza".

El equipo de gobierno llevó a pleno y aprobó una propuesta para rescindir el contrato con la empresa que gestiona el albergue desde 2010, Cumirpal Mallorca S.L., debido a que tras dos años todavía no ha abonado la fianza obligatoria y ni siquiera ha pagado la primera mensualidad. La sociedad se comprometió a pagar un canon mensual de 2.000 euros, lo que ha acumulado una deuda de 75.000 euros, cifra a la que hay que añadir unos 20.000 euros más en concepto de intereses, y la garantía definitiva.

Simonet no respondió en el pleno a ninguna de las acusaciones y preguntas que le hizo Marcús, y se limitó a reconocer que "es verdad que nos hemos retrasado bastante porque pensábamos que se podía solucionar negociando y de forma amistosa". Según el alcalde, "esperamos poder recuperar esta deuda y si es necesario actuaremos contra la administradora de la empresa. Lo que es seguro es que este caso nos sirve para aprender".

El PSM monopolizó un debate en el que PP, PSOE y Esquerra prácticamente no intervinieron. Marcús preguntó a Simonet por qué se le ha dado trato de favor a Cumirpal, y quién y cuándo autorizó la ocupación de las instalaciones a una empresa que no había firmado ningún contrato.