­Catalina Mas no podrá seguir los pasos del carismático Joan Font Massot, al no lograr retener ayer la mayoría absoluta conseguida en Petra por el PSM desde hacía ya doce años. Pese a la importante bajada de casi 250 votos, los nacionalistas no deberían tener excesivos problemas para lograr mantenerse al frente del Consistorio mediante un posible pacto natural con el PSOE, que por primera vez en muchos años logra un regidor: Maria Antònia Alzamora.

El PP por otra parte, aunque previsiblemente quede perjudicado por acuerdos posteriores, recorta de manera notable la distancia que les separaba del PSM y se queda a menos de 50 votos, permitiendo a la lista liderada por Martí Sansaloni aumentar de tres a cuatro sus concejales.

El caso opuesto es Convergència, que sufre la irrupción de la Lliga y la desaparición de UM, perdiendo más de un centenar de votos y a uno de sus dos representantes municipales.