El juez de guardia de Barcelona decretó el jueves el ingreso en prisión provisional del hombre de 65 años acusado de provocar el martes pasado un incendio en la sacristía de la Sagrada Familia, que obligó a desalojar del templo modernista a unos 1.500 turistas.

Según informó el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), el titular del juzgado de instrucción número 26 de Barcelona, en funciones de guardia, decretó prisión provisional para José María L.S., de 65 años, acusado de un delito de incendio.

El fuego destruyó casi completamente la sacristía, de unos diez metros cuadrados, y dejó ennegrecida por el humo la cripta, en la que ahora ya no se pueden celebrar misas.

En el momento de la detención, José Maria L.S. llevaba en sus bolsillos dos encendedores, un esprai de aceite, una pequeña campana de cobre y plata utilizada para la consagración y cinco juegos de llaves de los cepillos. Al parecer, el hombre, visiblemente alterado, accedió a la cripta por una rampa al grito anticlerical de "todo esto es robado".