El hombre arrestado el pasado martes por encañonar con una pistola a una camarera en una cafetería de la plaza Porta de Sant Antoni, en Palma, amenazó a la mujer porque no le sirvió una copa. La empleada alegó que estaba muy bebido y le dijo que se marchara. Entonces, el sospechoso reaccionó de forma violenta insultándola y sacando un arma de fuego real con la que le apuntó en presencia de varios testigos. Un cliente se arrojó sobre él al ver cómo encañonaba a la víctima y, al final, la Policía Nacional procedió a detenerle. Los agentes le intervinieron la pistola, modelo HK semiautomática de 9 milímetros, así como tres cargadores y 25 cartuchos.

Los hechos ocurrieron el martes a las nueve de la mañana cuando el hombre, de 40 años, entró en el local en estado ebrio y pidió un café. Mientras estaba en la barra, increpó a un cliente y, tras pagar la consumición, pidió una copa. La camarera se negó a servirle al estar muy bebido y él respondió con insultos. Acto seguido, la mujer alertó a la Policía y el hombre, muy alterado, empezó a amenazar a los presentes. "Vais a saber lo que es la vida real", dijo. Poco después, se levantó la camisa y se sacó de la cintura una pistola. Dos clientes salieron huyendo y el sospechoso desde la puerta encañonó a la víctima en la cabeza. El hombre volvió a proferir amenazas: "Vais a flipar cuando veáis cómo corre la bala". La Policía le detuvo e investigó la procedencia del arma. El arrestado dijo que era de un compañero de piso.