Fútbol

Lamine Yamal deja sin premio al Mallorca ante el Barcelona

Un golazo del adolescente a los setenta y dos minutos firma la derrota de los bermellones en un partido en el que han cuajado una gran primera parte y se han ido diluyendo en la segunda (1-0)

Rajkovic para un penalti a Gundogan que ha dado autoestima a los de Aguirre, que han pagado su falta de colmillo cuando mejor estaba jugando

Sebastià Adrover

Sebastià Adrover

Un golazo de Lamine Yamal ha dejado sin premio al Mallorca en el Lluís Companys. Ha estado cerca, pero su falta de colmillo y el talento del adolescente en el minuto setenta y dos han sido decisivos para que el Barcelona haya logrado el triunfo (1-0).

La primera parte ha sido muy buena, con personalidad y criterio incomodando a los azulgrana, pero en la segunda se ha ido diluyendo hasta que el extremo ha marcado las diferencias.

Esta derrota no es ningún drama, pero es de las que da rabia porque el adversario no ha sido tan superior. No hubiera sido descabellado arrancar un punto de este estadio, pero una vez más los de Javier Aguirre han pagado su inocencia en ataque cuando mejor estaban. Eso sí, Rajkovic, muy entonado, les ha dado vida al detener un penalti lanzado por Gundogan a los veintitrés minutos que hubiera cambiado el escenario.

El equipo regresa de vacío a la isla, pero en su orgullo debe quedarse que ha sido capaz de hacer muchas cosas bien ante un adversario tan potente. Y eso que ha empezado tímido, pero ha sido cuestión de tiempo porque no ha tardado mucho en evidenciar que estaba cómodo, con y sin balón.

Un chut de Koundé ha sido la primera acción de un inicio en el que al Barcelona le costaba encontrar huecos. Hasta que en el minuto veinte ha podido cambiar el encuentro. Copete ha derribado sin querer, en plena carrera, a Raphinha y el árbitro, a instancias del VAR, ha señalado penalti. Está por ver si eso hubiera sucedido en la otra área si el videoarbitraje hubiera avisado, pero la realidad es que era pena máxima. Y Rajkovic, emulando a su compañero Greif en la vuelta de la Copa del Rey ante la Real Sociedad, le ha adivinado la intención a Gundogan y ha despejado. Es el primer tiro desde los once metros que han fallado los locales en todo el curso.

Autoestima

Eso le ha dado mucha autoestima a un Mallorca que estaba haciendo las cosas bien y que no merecía ese castigo. Darder, que ha cuajado muy buenos minutos, ha enviado un gran centro al corazón del área que Muriqi y Larin solo han rozado. Los baleares sabían lo que tenían que hacer y solo le faltaba precisión en los metros decisivos. Como en un remate del canadiense de cabeza demasiado flojo y otro, tras otro pase del artanenc, que Morlanes ha obligado a estar en su sitio a Ter Stegen.

Los de Aguirre han mostrado los dientes, pero también es cierto que Joao Félix ha asustado con un zurdazo raso que se ha ido fuera. Eso sí, Larin se ha vuelto a mostrar inocente después de ganar la espalda a Íñigo Martínez y plantarse ante el meta alemán, pero su disparo se ha marchado desviado. Eso sí, Fermín, que ha sustituido al lesionado Raphinha, también ha probado fortuna con un testarazo que ha sacado Rajkovic. Y justo antes del descanso es increíble que los colegiados no mantuvieran el mismo criterio. Lamine Yamal le dio una patada a Muriqi, pero el VAR no ha advertido de ello a Iglesias Villanueva.

El panorama en la reanudación ha cambiado porque al Mallorca le duraba menos el balón y eso es dar mucha ventaja a un adversario de este calibre. Joao Félix ha estado a punto de sorprender con un chut que ha rebotado en Nastasic, pero la reacción del portero serbio ha sido fabulosa demostrando sus reflejos.

El Barcelona ha dado un paso hacia adelante, pero el que ha mirado a la portería ha sido Muriqi, con un disparo que ha blocado Ter Stegen. Después ha sido Gundogan el que ha probado suerte, pero Rajkovic ha estado seguro. No obstante, en la jugada en la que ha estado espectacular ha sido en un obús de Yamal que ha rozado con los dedos el cancerbero antes de que se estrellara en el larguero.  Dani Rodríguez, por un lado, y Lewandowski y Vitor Roque, han entrado para dar otro aire a los suyos. Ha dado la impresión de que la gasolina se le empezaba a acabar a los visitantes porque ha reculado muchos metros para defenderse como pudiera. De hecho, empezaba a perder demasiado la pelota en la salida, una temeridad.

Marcan las diferencias

Antonio y Jaume Costa han saltado al césped para tratar de insuflar más oxígeno a un Mallorca que lo necesitaba, pero ha aparecido un niño para marcar las diferencias. Lamine Yamal, que todavía tiene dieciséis años, ha sorteado a Dani Rodríguez y ha soltado un chut con la izquierda que se ha ido directo al único lugar en el que Rajkovic no podía llegar. Un golazo, las cosas como son.

Quedaban dieciséis minutos más el descuento, había tiempo para hacer un esfuerzo. Han entrado Abdón y Radonjic y los rojillos han pasado a una defensa de cuatro. Había que intentarlo como fuera, caer tampoco era ningún desastre.

Precisamente el cedido por el Torino ha protagonizado una buena contra, pero se ha emborrachado de balón y no ha chutado. Y poco después ha demostrado su velocidad, pero su centro no ha encontrado rematador. Ahí ha muerto el encuentro que se ha escapado cuando se empezaban a frotar las manos.