Lo dijo la semana pasada tras empatar ante el Levante y lo reiteró ayer en la sala de prensa de Son Bibiloni. Javier Olaizola tiene claro que los once encuentros que quedan por delante forman parte de su Liga. "Creo que empezamos nuestra miniliga. Es muy importante ya que nueve de los once rivales a los que tenemos que enfrentarnos están situados de la décima posición para abajo y por lo tanto, ante el Alcorcón, nos encontramos ante el primer partido que hay que ganar", razonó.

El técnico vasco tiene la esperanza puesta en el encuentro ante el conjunto madrileño. En Alcorcón se deben sumar los tres puntos. El empate ante el líder de la Liga sentó como un jarro de agua fría en el vestuario. "El otro día ante el Levante, para ellos fue una derrota. No se les puede echar nada en cara. Es un orgullo entrenarles, porque un entrenador lo que quiere es que sus jugadores se dejen el alma, sean intensos, compitan como animales y en todo eso, excepto en la segunda parte del partido ante el Tenerife, no se les puede echar nada en cara", defendió Olaizola ante los periodistas.

Dos puntos por encima del conjunto bermellón en la clasificación, el Alcorcón recibe al Mallorca con muchas bajas en la línea defensiva, algo que el técnico vasco no tilda de especialmente positivo: "Viene bien que el rival tenga el mayor número de bajas posibles, pero también puede tratarse de un arma de doble filo. Habrá que esperar a ver como retoca Julio Velázquez el equipo, porque no sabemos muy bien que hará".

Olaizola también se refirió al futbolista más peligroso del plantel madrileño, David Rodríguez, quien con once tantos, destaca en la línea ofensiva. "Si Rodríguez tiene una mala tarde, nos beneficiará mucho. Para ellos es el futbolista referencia, el goleador, el que les da algo diferente, aunque tampoco hay que olvidar a sus tres medias punta. Son futbolista de buena calidad, verticales, hay que estar muy atentos a ellos también".

El preparador tiene claro cuál es la línea a seguir por parte de sus pupilos para lograr los tres puntos. "Si jugamos como en el segundo tiempo ante el Levante, vamos a ganar seguro, de eso no hay ninguna duda. El Alcorcón no tiene las mismas características, ni jugadores tan buenos", recalcó Olaizola que se apresuró a asegurar que "en esta categoría todos los rivales son duros, y todos te pueden pintar la cara". "El Mallorca saldrá a ganar". Esa es la idea que ha intentado implantar el entrenador bermellón a los suyos a lo largo de la semana. El problema es que, en lo que lleva de trayectoria como técnico del primer equipo, la intención siempre ha sido la misma y, dados los resultados, el mensaje no ha calado muy hondo en la plantilla: "La actitud con la que va a salir el equipo - en el Estadio municipal de Santo Domingo- va a ser la de ganar, como lo hemos hecho hasta ahora, nunca hemos salido a empatar un encuentro. Hay que pensar que este equipo sólo nos lleva dos puntos y que por ahora tenemos el galaverage ganado, por lo tanto, salimos a ganar y, según como transcurra el partido, perder sería un desastre, pero depende de como vaya, el resultado habrá que valorarlo de la forma más objetiva que podamos", agregó. "Nos está costando hacer gol más de lo normal, hay que dejar la portería a cero y anotar, al menos, un gol, esa es la clave", señaló.