La Policía Local de Sineu instala cámaras en la calle para vigilar delitos y actos vandálicos

La Policía Local de Sineu ha instalado un total de cuatro cámaras de videovigilancia en la Plaça del Fossar de la localidad del Pla con el objetivo de controlar la posible comisión de delitos contra las personas y de actos vandálicos contra el patrimonio público, así como vigilar el tráfico en este sector, punto central del mercado de los miércoles y uno de los espacios más transitados del pueblo por la existencia de un concurrido parque infantil y de una pista deportiva que también es muy utilizada por los residentes.

Los cuatro dispositivos instalados hasta la fecha en la Plaça del Fossar forman parte de un proyecto más amplio que contempla la instalación de más cámaras en otros puntos de la localidad como la estación ferroviaria. Dos de ellos están en una farola ubicada en la zona próxima al ‘abeurador’. Una de las cámaras está enfocada hacia la zona de juegos infantiles y otra hacia el exterior de la plaza, por donde pueden pasar los vehículos. Los otros dos dispositivos están en la parte alta del Fossar y también abarcan parte del interior de la plaza y parte del exterior.

Las cámaras todavía no están operativas porque el ayuntamiento de Sineu, en este caso la Policía Local, está tramitando la autorización correspondiente ante la delegación del Gobierno. Una vez tengan permiso para entrar en funcionamiento, los agentes policiales podrán supervisar las imágenes a través de monitores ubicados en el cuartel. Tampoco se han instalado todavía carteles para informar a la población de la presencia de las cámaras, un requisito obligatorio. La policía confía en que la autorización definitiva llegue después de esta Semana Santa.

El jefe de la Policía Local de Sineu, Antoni Frau, explica que el objetivo de las cámaras está relacionado con el control del tráfico en el interior de la localidad y la seguridad ciudadana y que los dispositivos «serán unos nuevos ojos para nosotros» porque permitirán obtener imágenes de posibles incidentes que, de otra forma, apenas dejan pruebas. «A veces en el parque tenemos quejas de menores que se meten con otros niños o les amenazan», explica. «Hace poco también se produjo un caso de robo de unos 1.500 euros por parte de unos menores en una de las casetas de feria y, otro día, encendieron fuego en el parque», añade el jefe de la Policía, que considera que las cámaras serán una gran ayuda para los agentes a la hora de esclarecer este tipo de faltas y delitos.

También para identificar a los autores de actos vandálicos como los que, de forma frecuente, afectan al mobiliario urbano y a monumentos como el ‘abeurador’. Por otra parte, también podrán vigilar el tráfico en la zona de influencia de las cámaras. Las imágenes captadas por los dispositivos permanecerán grabadas a lo largo de 30 días antes de su borrado automático.

«A largo plazo estas cámaras dominarán parte del espacio urbano en la isla, en Santa Eugènia y Maria también las han instalado», añade Frau, consciente de que «a unos les gustará y a otros no», pero convencido de que «pueden servir de gran ayuda».

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