La dueña de Can Mas rechaza ahora cederlo al ayuntamiento de Sóller y creará una fundación para gestionar el casal

El giro sorpresivo que ha dado el futuro museo de Can Mas se produce semanas después de que el pleno del ayuntamiento de Sóller rechazara la donación del inmueble

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k / Joan Mora

Portazo definitivo a la cesión del palacete de Can Mas al ayuntamiento de Sóller. La dueña del edificio ha rechazado entablar nuevas negociaciones con el ayuntamiento de Sóller para donarle el casal y en su lugar constituirá una fundación que gestionará el edificio que se convertirá en casa museo.

Así lo notificaron ayer los representantes de la benefactora Paulette Mas al alcalde de Sóller, Miquel Nadal, quien confiaba entablar una nueva negociación con la propiedad con el fin de llegar a un acuerdo para la cesión del edificio al ayuntamiento. Pero esta cesión no se producirá. Una fundación que ya está en fase de constitución y que llevará por nombre Vicenç Mas Coll cogerá las riendas del edificio para convertirlo en una casa museo de arte antiguo que, por expreso deseo de su propietaria, “será para la Villa de Sóller”, según explicó el representante de la dueña y ex alcalde, Guillem Bernat.

La casa acogerá, además, parte de la colección histórica de indumentaria mallorquina de la agrupación folclórica Aires Sollerics para crear una sala específica destinada a su exhibición. Por su parte, el inmenso jardín de la casa se convertirá en un “espacio público que podrá albergar desde actividades culturales hasta paseos o lecturas de libros”, explicó Bernat, quien se perfila como el primer presidente de la fundación que gestionará Can Mas.

El giro sorpresivo que ha dado el futuro museo de Can Mas se produce semanas después de que el pleno del ayuntamiento de Sóller rechazara la donación del inmueble. Por entonces, el equipo de gobierno que encabeza Miquel Nadal alegó estar en desacuerdo con algunas de las cláusulas de la donación, por lo que apeló al inicio de una nueva tanda de reuniones con el fin de llegar a un acuerdo. Nadal reiteró su voluntad de aceptar la donación, pese al rechazo que se plasmó en el pleno del consistorio. Algo que molestó tanto a la dueña de la casa como a sus representantes, que lamentaron la decisión del ayuntamiento de rechazar una donación que se fraguó en la pasada legislatura en la que tanto Guillem Bernat como el entonces alcalde de Sóller, Carlos Simarro, tuvieron una participación activa. Tanto es así, que la donación se llegó a firmar ante notario el julio del año pasado por el actual primer edil, quien meses después votó en contra de la donación del palacete.

“Para la villa de Sóller”

El representante de la benefactora recalcó que si bien no será posible ceder el palacete al ayuntamiento se materializará a través de una fundación privada, “porque es decisión y voluntad de Paulette Mas que la casa sea para la villa de Sóller”.

El casal está situado en la calle Reial, frente al malogrado teatro Defensora Sollerense. Se trata de un inmueble de estilo modernista que ocupa más de 700 metros cuadrados. Anejo a esta vivienda, hay un jardín de más de 2.000 metros cuadrados que colinda con varias calles y flanquea la estación del tren de Sóller.