Pollença: El Pi de Sant Antoni, cortado en pedazos

Casi un mes después del día de Sant Antoni, la Plaça Vella de Pollença ha vuelto a acaparar este miércoles la atención y a primera hora de la mañana se ha llenado de público para presenciar la tala del Pi de Sant Antoni que permanecía plantado en el centro de la plaza desde el 17 de enero, cuando el joven Pau Cifre logró subirlo en un tiempo récord en una de las fiestas del Pi más tranquilas que se recuerdan. La retirada del árbol que había sido talado en Ternelles se celebra siempre el ‘Dimecres de Cendra’ y cada año acumula más público.

Antes de las 8 de la mañana, la Plaça Vella ya estaba llena de público para ver caer al pino. La primera acción ha sido atar una cuerda al pino y después se ha procedido a cortarlo con la motosierra. El árbol de 20 metros ha caído sin ningún incidente cuando pasaban seis minutos de las 8. Los ‘Xeremiers orats’ han amenizado la tradición. Antiguamente, se usaba la madera del Pi de Sant Antoni para fabricar las espadas que llevan los moros en el simulacro de la Patrona. No obstante, actualmente el pino se corta en numerosos trozos que la gente se lleva como recuerdo de una de las fiestas más importantes del año en Pollença.