Los vecinos alertan del «impacto exagerado» del parque solar de Can Garriga en Marratxí

Los afectados reclaman al Govern que no apruebe el proyecto «por hacer un uso industrial del suelo rústico» y por «invadir un núcleo urbano deforestando una zona rústica»

Los vecinos buscan con sus alegaciones proteger el paisaje de la zona.

Los vecinos buscan con sus alegaciones proteger el paisaje de la zona. / MIQUEL BOSCH

Los vecinos de la urbanización de Can Garriga de Marratxí se oponen al proyecto de un «mega parque fotovoltaico» que se está tramitando y que se quiere hacer en Can Garriga. Estas instalaciones energéticas, explican contarán con 18.368 módulos de placas solares ocupando un espacio de 26,2 hectáreas, con una producción total de 24.741 Mwh.

Los vecinos alertan del «impacto exagerado» del parque solar de Can Garriga en Marratxí

Los vecinos alertan del «impacto exagerado» del parque solar de Can Garriga en Marratxí / Miquel Bosch

En sus alegaciones, los vecinos argumentan que «este hecho provocará un grave impacto en una zona de garriga y cultivo, transformando el paisaje y provocando un serio desequilibrio en el ecosistema». «Alegamos que la barrera natural de árboles que quiere poner la empresa no será el mismo soporte natural que tenemos ahora con algarrobos y almendros que cubren toda el área que se planea para el nuevo parque», lamentan. «Desde hace 20 años sufrimos la recalificación que se hizo para plantarnos el parque de las nuevas tecnologías de Tirme», aseguran, por ello, rechazan el parque solar de dichas dimensiones cerca de núcleo urbano, «ya suficientemente afectado por esta circunstancia que tenemos».

Además, exponen que para la evacuación de la energía generada, «se pretende instalar un cable de media tensión de 9,5 km, que pasa por nuestra urbanización de Can Garriga y por el torrent Gros. Este cable se pretende soterrar bajo la acera, a un metro de nuestras viviendas». Actualmente, añaden los vecinos, «no se tienen estudios del impacto real en núcleos urbanos del traslado de este tipo de energía».

Los afectados esgrimen que «estas instalaciones industriales contradicen los usos que el Plan Territorial de Mallorca prevé para el suelo rústico, aunque se han hecho modificaciones normativas que permiten excepcionalmente estos tipos de instalaciones en suelo rústico». Además, añaden que su urbanización está adherida a un núcleo urbano residencial.

Por todo ello, los vecinos piden al Govern que no apruebe el proyecto de Can Garriga porque supone un «impacto exagerado en el medio, en el ecosistema y el paisaje de la urbanización». También reclaman su rechazo «por hacer un uso industrial del suelo rústico y no priorizar la actividad agraria en estos espacios», además de «por invadir un núcleo urbano, desforestar una área rústica cerca del parque de Tirme». Los vecinos también exigen que el Ejecutivo autonómico rechace el proyecto por ser contrario a la Estrategia del Paisaje del Consell de Mallorca, así como por alterar el hábitat de especies protegidas, especialmente la tortuga mediterránea y el erizo.

Revisar informes

Los vecinos también reclaman que se revisen los informes y exigen al Consell de Mallorca «una planificación territorial efectiva y concreta para no convertir millones de hectáreas de tierra fértil en polígonos industriales, así como proteger el sector agrario y el paisaje de la isla». Asimismo reclama una planificación territorial de la ubicación, tipología y dimensiones de las instalaciones fotovoltaicas, tal como obliga la Ley de Cambio Climático y Transición Energética de Balears.

Al Ayuntamiento de Marratxí exigen que mantenga su compromiso «en la negativa de utilización de un espacio público, como es la zona urbana de Can Garriga, para un uso privado, como es el soterramiento del cable de evacuación, más cuando los efectos de los campos electromagnéticos generados sobre la salud de las personas son, a día de hoy, desconocidos».

En su escrito, los vecinos manifiestan su preocupación por el hecho de que se pueda plantear «algo así sin hacer un estudio de la situación de la población vecina y el impacto que puede tener un uso privado, sin finalidad social, con un perjuicio ambiental y degradación de la zona». Finalmente, piden «un informe completo del proyecto que afecta a la urbanización Can Garriga por proximidad como núcleo urbano».

Cabe recordar que en Marratxí actualmente hay 5 proyectos de instalaciones fotovoltaicas en suelo rústico en tramitación.

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