Lletra menuda: La lana recupera su fama

Las explotaciones podrán utilizar la lana de sus ovejas para usos agrícolas.

Las explotaciones podrán utilizar la lana de sus ovejas para usos agrícolas. / Pere Joan Oliver

Llorenç Riera

Llorenç Riera

El refranero español es rico en acepciones relativas a la lana, pero, para no salir esquilados, conviene tener en cuenta que la expresión popular también necesita, y de hecho lo hace, adaptarse a la realidad del momento. En consecuencia, mientras «unos tienen la fama y otros cardan la lana», nosotros mantendremos, al hilo de la actualidad, que esta misma lana, que ya no es uniforme ni marginal, está ahora mismo en plena disposición para recuperar su fama.

De estorbo a medio innovador atractivo para la actualización textil, la fertilización agrícola, el aislamiento en la construcción y la creatividad artesana. A grandes rasgos este es el proceso que está dando nueva vida a la lana. Se iba conociendo poco a poco algo de ello en una tendencia que ahora se concreta más y mejor con la alianza de Mallorca Rural y Leader Illa de Menorca para desarrollar el proyecto Llaretss.

No hay un solo resultado del esquile de las ovejas. Se persigue el poder poner nombre y apellido a la lana de cada una de las razas para así determinar qué se puede hacer en concreto con ellas. Es una pequeña revolución, un cambio de concepto en busca de la utilidad que comportará la vuelta a la escuela por parte de los productores. Paralelamente al estudio para analizar las razas autóctonas se confeccionará una guía de buenas prácticas ganaderas. También habrá un plan piloto en diez fincas para crear compost a partir de lana, elementos orgánicos y restos de poda. Todo esto habrá que aprenderlo para volver a mirar de cara a la lana y admitir que, tras unos años de paréntesis, puede tener un buen futuro en consonancia con un pasado en el que ha sabido arropar a la payesía de las islas.

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