Sineu sacrifica una docena de palomas al día para combatir una grave masificación

El Ayuntamiento coloca trampas con cebos en puntos estratégicos y en ocasiones puede llegar a atrapar hasta 30 aves de una tacada

Un grupo de palomas sobrevuela la parroquia de Santa Maria de Sineu.

Un grupo de palomas sobrevuela la parroquia de Santa Maria de Sineu. / Puiggròs/Díngola

Joan Frau

Joan Frau

La localidad de Sineu sufre una auténtica plaga de palomas que provocan numerosos problemas de suciedad en los edificios públicos y privados y alteran los elementos patrimoniales del centro del pueblo, declarado en su conjunto como Bien de Interés Cultural (BIC). Para tratar de paliar la problemática y reducir la plaga, el ayuntamiento ‘sineuer coloca trampas en puntos estratégicos del centro en las que diariamente una media de doce palomas quedan atrapadas al resultar atraídas por los cebos con comida. 

El alcalde de Sineu, Tomeu Mulet (PP), explica que la masificación de palomas «es un problema» tanto en la localidad del Pla «como en otros pueblos de Mallorca». Desde hace varios años se colocan «jaulas engañadoras» en diferentes lugares del centro como la parroquia, el convento de las monjas de la Caridad (en el que se ha obtenido el permiso de la familia propietaria, los Dameto) o el claustro de Sant Francesc en las que cada día quedan encerradas «de diez a doce palomas», aunque en ocasiones se han llegado a acumular 30 ejemplares en el interior de las trampas. Una vez atrapadas, las aves son sacrificadas y sirven de alimento para otras especies de aves después de ser entregadas a la fundación Natura Parc, explica el alcalde.

Sin embargo, son muchas más las que siguen en libertad porque se reproducen de forma muy rápida, lamenta Mulet. Los centenares de ejemplares que viven en el pueblo causan numerosos problemas porque los excrementos ensucian el patrimonio público y privado y pueden llegar a atascar las canalizaciones que conducen las aguas pluviales a las cisternas. También pueden ser portadoras de enfermedades, por lo que la reducción del número de palomas se entiende como una necesidad para combatir un problema de salud pública. 

Además de las trampas, el consistorio ‘sineuer’ está estudiando otros sistemas para paliar la problemática de forma más rápida y efectiva. Una de las soluciones que se aplicarán a partir de la próxima primavera, según explica el regidor popular, consiste en proporcionar piensos esterilizantes a las aves, un sistema que ya se lleva a cabo en otros municipios como Palma. No obstante, hay dudas sobre la efectividad de este método en Sineu. «El problema es que para que este sistema sea válido las palomas deben alimentarse exclusivamente de este pienso y cada ave debe comer unos ocho gramos diarios, y en Sineu sabemos que las palomas obtienen otros alimentos porque salen en manada al campo, algo que no ocurre en Palma, por ejemplo», señala Mulet.

Otra práctica como la falconería para espantar a las aves «sólo desplaza el problema a otras partes», por lo que no se ve como una opción en el municipio del Pla.

La llegada del invierno será positiva para capturar más palomas, ya que «no hay tanta comida y entran más en las jaulas donde quedan atrapadas».

Suscríbete para seguir leyendo