Fuentes de la empresa que aporta los acompañantes en el servicio de transporte escolar de la isla, que tiene sede en Palma y realiza esta tarea a partir de una concesión administrativa de la conselleria de Educación y Cultura, admitieron ayer el incidente y aseguraron que la persona que ejercía de acompañante en el autobús que dejó a los niños en Ariany "ha sido suspendida" de sus funciones. Al parecer, esta monitora era la sustituta de otra trabajadora que es la titular de este trayecto y que en estos momentos se encuentra de baja. Las fuentes subrayaron que el incidente tuvo su origen en el "mal comportamiento" de los alumnos que viajaban en el bus, lo que motivó que "los adultos decidieran no abrir las puertas del autobús (en Maria de la Salut) y llevar a los niños a la siguiente parada", en Ariany. A pesar de la mala actitud de algunos alumnos durante el trayecto, la empresa admite que la monitora "no actuó de forma correcta", por lo que se han tomado medidas contra ella.

Por su parte, la dirección del instituto de Sineu aseguró ayer que, una vez conocido el incidente a raíz de las quejas cursadas por algunos padres, se puso en contacto con las dos empresas implicadas para pedir responsabilidades por lo ocurrido. "Han reconocido el error y aseguran que tomarán medidas para que no vuelva a pasar", admitieron las fuentes de la dirección del centro.