Así fue el secuestro de un Boeing alemán en el aeropuerto de Palma en 1977

Casi medio siglo después, regresa a la actualidad el secuestro de un vuelo Palma-Frankfurt de Lufthansa en octubre de 1977 por la reciente detención de la última integrante del grupo terrorista Baader-Meinhof

La detención de una terrorista de 65 años pone fin a una banda que tuvo su apogeo en el secuestro del vuelo Palma-Frankfurt en 1977.

La detención de una terrorista de 65 años pone fin a una banda que tuvo su apogeo en el secuestro del vuelo Palma-Frankfurt en 1977. / EFE

El 13 de octubre de 1977 el vuelo 181 de Lufthansa, un Boeing 737, fue secuestrado tras despegar del aeropuerto de Palma con destino a Frankfurt. En él viajaban 91 pasajeros, cuatro de ellos terroristas que embarcaron en Mallorca.

Se trataba de palestinos que secuestraron el avión con la ayuda de logística alemana. El secuestro había sido planeado conjuntamente por el grupo terrorista Baader-Meinhof, la Stasi germanooriental y el Frente Popular de Liberación de Palestina. La prensa de todo el mundo siguió el trayecto del aparato, que fue capturado cuando volaba sobre Nantes y desviado con destino a Líbano tras una accidentada travesía. Se dirigió con posterioridad a Dubai, siempre con la amenaza de derribar el aparato y el pasaje. La Baader Meinhof intercaló sus propias peticiones, dado que había simultaneado la acción aérea con el secuestro del industrial alemán Hans Martin Schleyer. 

Tras aterrizar en Mogadiscio, un comando alemán liberó al pasaje y mató a tres de los cuatro terroristas. La cuarta era la beirutí Soraya Ansari, que sobrevivió tras recibir cuatro balazos en las piernas y dos en el pecho. El piloto de la aeronave fue asesinado por los asaltantes.

Portada de Diario de Mallorca del 14 de octubre de 1977, con la noticia del secuestro

Portada de Diario de Mallorca del 14 de octubre de 1977, con la noticia del secuestro / DM

Los participantes eran veinteañeros. Ahora, este secuestro regresa a la actualidad tras la detención de Daniela Klette, superviviente del grupo Baader-Meinhof, que recibía en su país el sobrenombre de «los terroristas de la tercera edad».

Durante décadas, Alemania no ha cejado en su empeño de perseguir a los supervivientes del secuestro del Palma-Frankfurt. Te lo contamos en este reportaje.