El GOB exige que se renuncie a nuevas líneas aéreas desde Mallorca

La organización ecologista GOB se ha unido a una campaña a nivel europeo, organizada por el colectivo Stay Gounded, que pretende limitar la actividad de todos los aeropuertos, con el objetivo de frenar el crecimiento descontrolado del tráfico aéreo. El lanzamiento de esta campaña se justifica porque en estos momentos, tras superar la pandemia sanitaria, ya se han recuperado en Europa, y por supuesto en Mallorca, las cifras de número de pasajeros y de vuelos previos al año 2019.

El GOB ha exigido que se paralicen los nuevos proyectos de ampliación del aeropuerto de Palma, así como la creación de nuevas rutas de viaje, ya que esta situación repercute de forma negativa creando una masificación turística en Mallorca, cuyos beneficios no alcanzan a la población.

Pere Joan Femenia, como portavoz de la organización, explicó que el aumento del número de pasajeros que pasará por Son Sant Joan ha obligado a Aena a adaptarse a este aumento del tráfico aéreo, mediante un plan de ampliación del aeropuerto de Palma. La organización critica que, pese a que desde Baleares se han opuesto a este proyecto de ampliación, estas decisiones se toman en Madrid, sin valorar las consecuencias negativas que conlleva este crecimiento para la población local.

En la presentación de esta campaña se recordó que el tráfico aéreo es un factor muy contaminante del aire. De hecho, los aviones ocasionan el cinco por ciento de la contaminación de la atmósfera, que se traduce después de una media de más de 250 mil muertos en Europa.

El Gobierno avala permitir la actividad de terceros en el aeropuerto de Palma

Señalando cifras a nivel nacional, el portavoz ecologista explicó que el año pasado España acogió a 283 millones de pasajeros, pero que las previsiones para el próximo año superan los 300 millones. Ante este auge del tráfico aéreo, que se centra sobre todo en las ciudades turísticas, Aena se ha visto obligada a cambiar su plan estratégico, acometiendo ampliaciones de las infraestructuras de los aeropuertos, entre los que se incluye el de Palma. “Con la ampliación no se respeta las necesidades sociales de la isla y se facilita la masificación turística”, se denunció.

El GOB criticó que desde Aena se apueste por crear nuevas líneas que conecten Mallorca con otros países de América, Asia o del Medio Oriente. Asegura su portavoz que con estas conexiones se facilita la llegada a Mallorca de empresarios que inviertan en el sector inmobiliario, con gran capacidad económica, que encarece el precio de la vivienda en la isla y reduce la capacidad de acceso a una casa a la población local. Por esta razón, desde el Gob se exige que se renuncie a esta ampliación de estas nuevas líneas que unan Mallorca con otros destinos lejanos.

Industria rentable

La abogada Pilar Barceló denunció que los aeropuertos se han convertido en una nueva industria para el Estado, olvidándose de que son instalaciones que deberían estar al servicio de la sociedad. Por ello, se entiende que se están ampliando los espacios, convirtiendo los aeródromos en una especie de centros comerciales, que intentan atrapar con ventas a los millones de personas que atraviesan estos espacios.

Margalida Ramis, portavoz también del GOB, cuestionó que durante año se ha negado la ampliación del aeropuerto y se ha criticado la iniciativa de la organización ecologista al denunciar este proyecto. Sin embargo, afirma que los datos públicos que han ido apareciendo demuestran todo lo contrario, es decir, sí habrá una ampliación de las instalaciones de Son Sant Joan. Ramis insistió en que los proyectos de ampliación responden a la necesidad de atender a un mayor número de pasajeros, sin tener en cuenta que se destruye territorio, pero que también produce un nivel muy alto de contaminación acústica al ampliar el número de vuelos, que afecta sobre todo a las barriadas más próximas al aeropuerto.