Las estudiantes de Baleares de entre 14 y 18 años beben y fuman más que los chicos

La última encuesta sobre el uso de drogas en enseñanzas secundarias en España (Estudes) correspondiente al año 2023 ha puesto de manifiesto que las estudiantes con edades comprendidas entre los 14 y los 18 años de Baleares beben y fuman más tabaco que sus compañeros de género masculino. 

En términos generales, el estudio constata de nuevo que estas dos sustancias psicoactivas, el alcohol y el tabaco, son las más consumidas entre los estudiantes de Enseñanzas Secundarias.

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Con respecto al alcohol, Baleares descolla, junto al País Vasco, como la comunidad autónoma con mayor diferencia en el consumo de esta sustancia por sexos de forma habitual, esto es, en los últimos treinta días. 

El 55,6% de las estudiantes de género femenino admitió haber ingerido bebidas alcohólicas en el último mes frente al 48,4% de sus compañeros masculinos que confesó que también lo hizo con esa periodicidad. Son 7,2 puntos porcentuales por encima que sitúan a este archipiélago con mayor diferencia en este consumo por sexos tras el País Vasco (7,1%)

Pero es que este mayor consumo de alcohol entre el género femenino se da también en todas las variables analizadas. Así, casi el 79% de las estudiantes baleares (78,9%) confiesa haberlo consumido alguna vez en la vida frente al 72,8% de los estudiantes, más de seis puntos por encima.

Y también las chicas confiesan haber ingerido alcohol en mayor proporción que sus compañeros en los últimos doce meses, un 75,8% de las encuestadas frente al 70% de los preguntados de género masculino. La edad media del inicio del consumo de alcohol se sitúa en este archipiélago en los 14 años.

Borracheras

Una cosa es beber y otra muy diferente emborracharse. Pese a que se piensa que las jóvenes son menos proclives a beber en demasía, la última encuesta Estudes desmiente esta creencia. Al menos en este archipiélago. 

El sondeo nacional realizado con una muestra de 2.207 estudiantes de las islas pone de manifiesto que las chicas baleares con edades comprendidas entre los 14 y los 18 años participan en botellones con mayor frecuencia que sus compañeros masculinos.

Confiesan que lo han hecho al menos una vez en su vida el 50,7% de ellas frente al 40,3% de los chicos. También han participado más en estas juergas etílicas en los últimos doce meses, en un porcentaje del 44,9% frente al 36,4% de sus compañeros masculinos. 

Y de nuevo lo hacen en mayor medida en las borracheras en las que admiten haber participado en los últimos treinta días: más de una de cada cinco adolescentes femeninas (21,5%) lo ha hecho con esa periodicidad frente al 15,7% de los estudiantes de ESO masculinos baleares. 

Uno de cada 4 fuma regularmente

En el consumo de tabaco, siguiendo la tendencia detectada desde hace ya años de un incremento en el número de fumadoras femeninas, las estudiantes de Baleares también lo hacen en mayor medida que sus compañeros masculinos. Así, el 37,5% de las encuestadas aseguró que había fumado alguna vez en su vida frente al 31,5% de los adolescentes que admitieron haber exhalado en algún momento el humo de un cigarrillo. También superan en porcentaje (31,7%) a sus compañeros en la variable de haber fumado en los últimos doce meses y, por último, lo vuelven a hacer como fumadoras más regulares, en los últimos treinta días, con casi cinco puntos porcentuales de diferencia: casi una de cada cuatro estudiantes fuma regularmente (24,5%) frente al uno de cada cinco alumnos (19,8%) que también comienza a engancharse a este nocivo hábito.

La prevalencia general del consumo de cigarrillos en las islas entre los estudiantes de Secundaria es del 34,5% en alguna ocasión a lo largo de su corta vida, un punto superior a la media española situada en el 33,4%. Y del 29,1% y del 22,2% en, respectivamente, los últimos doce meses y los últimos 30 días. Ambos porcentajes también superan los promedios estatales (27,7% y 21%). La edad media del inicio en el consumo del tabaco se sitúa en las islas en los 14,1 años al igual que la media estatal mientras que la caída en un uso regular de los cigarrillos se retrasa hasta los 14,7 años (14,6 en el conjunto del país).

Los cigarrillos electrónicos no son inocuos y, en muchas ocasiones, son la puerta de entrada al consumo de los tradicionales. En Baleares, más de la mitad de los estudiantes de ESO (el 53,9%) admiten haberlos probado mientras que el 45,4% confiesan que lo han hecho de forma más regular, alguna vez en los últimos doce meses. Ambos porcentajes están por debajo del promedio del país.

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